Emanuel Moreno llegó a Paraná hace un mes desde Puerto Madryn donde estaba jugando una nueva temporada de la Primera Nacional. El mediocampista tuvo un gran año con el equipo de Chubut y convirtió goles importantes ante Ferro, Platense y Belgrano que hicieron que se elevara su cotización. El envión de su club y su rendimiento se frenaron la pandemia y a partir del 30 de junio, como la mayoría de los jugadores, se quedó sin contrato.
Moreno se destapa y se lo toma con calma
Moreno apareció en el radar de Quilmes, un institución de prestigiosa, que quiere contratar sus servicios y según confió están muy avanzadas las negociaciones para ser del Cerevecero. Confesó que en este momento de incertidumbre se necesita de una “empujón” para no caerse y agradeció el apoyo de su entorno.
“Después de la lesión que tuve fue todo positivo en la llegada a de Madryn. Encontré un lugar donde ni bien llegué me sentí cómodo, la gente siempre me trató bien y eso hizo que uno dentro de la cancha me sintiera mucho mejor. Y a medida que fue pasando el tiempo, fui ganándome la confianza del técnico y terminé siendo el capitán y fue mi primera experiencia como profesional y fue muy lindo para mí. Y bueno, fue muy feo que se terminara el torneo porque veníamos en levantada”, señaló sobre su experiencia en Brown de Puerto Madryn donde estuvo desde principios de 2018 luego de estar siete meses sin jugar por una lesión que hizo que quedara libre en el segundo semestre de 2017. Ahora aparece en el horizonte una nueva camiseta y ya hubo contactos importante según adelantó ante la consulta sobre si va a jugar en Quilmes. “No está definido, porque no tengo cerrado nada con ningún club. Sí existe el llamando de Facundo (Sava) que lo tuve en Unión de Santa Fe. Me llamó y hablé con el manager de la institución y hemos tenido muchas charlas, pero mi futuro no está definido”, confesó el jugador entrerriano de 30 años en diálogo con La Radio de UNO (97.1).
Más allá de lo que pueda pasar en las próximas horas, Moreno, indicó que jugar en Quilmes sería “un gran paso” en su carrera. “Quilmes es un club con historia y por más que esté en la Segunda División del fútbol argentino, es un club de Primera por cómo se maneja, la gente que tiene y eso hace que sea muy lindo llegar ahí. Hasta ahora es un deseo y no es algo concreto, el tiempo dirá que va a pasar”, manifestó el jugador que comenzara su carrera en Argentino Juniors de Paraná.
Al momento de analizar la situación del fútbol argentino, Moreno dijo que “es algo triste” que haya tantos jugadores sin contrato porque “nadie se lo esperaba”. “El tema de que se sacaran los descensos no es algo bueno para los que nos quedamos sin contrato a partir de julio porque los clubes no van a buscar incorporar tantos jugadores sino que van a foguear a los chicos del club que no me parece mal, pero muchos jugadores van a quedar sin trabajo. Pero bueno se habló con el gremio y estuvieron en contacto con nosotros y por lo menos los jugadores que queden libres van a cobrar el mínimo. Por lo menos es un aporte al que no consiga club y a la obra social”, consideró el jugador.
Al mismo tiempo dijo que los clubes deberán “solidarizarse” con el ascenso porque expresó que la situación será “muy difícil”. “Tengo amigos que están en otras categorías y en algunos casos están pensando si van a seguir jugando al fútbol. Están pensando en buscar otro trabajo y dejar de jugar. Y es raro porque el futbolista profesional tuvo que sacrificarse y dejar muchas cosas de lado y que esta pandemia te saque eso es muy complicado. Ojalá se vuelva a los entrenamientos y volver a jugar con todo el protocolo para que esto pase”, deseó el jugador que vistiera la camiseta de Unión de Santa Fe en Primera.
NO CAERSE.
Moreno reconoció que entrenar en casa, solo y fuera de las canchas es una tarea muy complicada para cualquier futbolista. Y en ese contexto relató que para no quebrarse necesita un “empujón” cada tanto de su gente. “Trato siempre de mantenerme bien en lo físico, de entrenar y hay días que se te hace difícil y hay que agarrarse de algún lado porque la cabeza influye. A veces hay que buscar a alguien que te levante. Por suerte en Paraná tengo a mis amigos y a mi novia y les digo que me peguen ese empujón cuando no me ven bien y así lo voy a ir llevando”, sentenció