Rosario Central goleó a Newell's en el clásico de Inferiores y dejó en claro la paternidad con un festejo muy especial.
Uno de los niños, en el 7 a 2 del Canalla, se juntó los brazos como meciendo un bebé a lo Bebeto para tildar de "hijos" a sus pares de la Lepra y luego imitó los movimientos de un pingüino, como suelen cargar a los hinchas de Newell's.
El video del festejo generó un gran debate en las redes sociales y diversos medios deportivos. Algunos lo tomaron solo como parte del folclore mientras que otros amantes del fútbol lo consideraron una provocación innecesaria, más aún tratándose de niños.
Desde aquí, creemos que somos los mayores los que le damos trascendencia y connotación negativa y generamos violencia con nuestros comentarios cuando estos niños simplemente festejaban y se divertían en un partido que lo merecía y que todos quisiéramos ganar.