La Cámara Federal de Apelaciones de Paraná emitió esta semana tres fallos en contra de igual cantidad de represores que son juzgados en la causa Área Paraná, cuya etapa de plenario se desarrolla en estos días. En dos de ellos rechazó las recusaciones contra el juez Leandro Ríos que interpusieron Cosme Demonte y Jorge Appiani; mientras que en el tercero denegó la excarcelación de Carlos Horacio Zapata, todos ellos acusados de delitos de lesa humanidad cometidos en la región durante la dictadura.
Rechazaron las recusaciones de los represores contra el juez Ríos
En la resolución que rechaza el planteo de Appiani, los camaristas Cintia Gómez, Edgardo Alonso y Mateo Busaniche desestimaron la causal de “enemistad manifiesta” que presentó el acusado para recusar al juez que conduce el plenario, se informó a UNO.
El exmilitar y abogado pretendía separar al magistrado en base a formalismos que no habría respetado en las declaraciones de los primeros testigos; también porque habría “manipulado” la prueba con “interferencias indebidas” y porque se habría permitido a un declarante acceder al pliego de absolución de posiciones antes de la audiencia. Appiani quería apartarlo de la causa, de los incidentes y causas conexas, que se designaran conjueces y se declarara la nulidad de todos sus resolutorios emitidos en el plenario.
El fiscal de Cámara, Ricardo Álvarez, se expidió en igual sentido que la Cámara y calificó al planteo de “queja caprichosa por parte de quien no articuló ningún tipo de cuestionamiento en su debido momento –en la declaración oportuna– y pretende, mal y tarde, articular observaciones desajustadas a la normativa procesal”.
Los camaristas entendieron que se trata de “meras disconformidades o críticas” del represor hacia el criterio del juez, negaron que el pliego de posiciones se hubiera abierto antes de la audiencia y respaldaron a Ríos al frente de la causa.
“Contaminación política”
También se rechazó la recusación presentada por Demonte, mediante su abogado defensor Guillermo Retamar. En este caso, el argumento es que todos los que juzgan delitos de lesa humanidad son –según palabras de Demonte y Retamar– “tribunales especiales” designados en actos de “política partidaria”. Otro cuestionamiento fue que la Corte Suprema se constituyó como “herramienta de política del gobierno mediante la ideologización de los pronunciamientos” y que es parte del “sistema populista de los Kirchner”.
En ese sentido, sostuvieron que las decisiones el juez Ríos contienen “alta contaminación política”, que “no tiene autoridad moral para cuestionar” sus planteos defensistas y que tiene “amistad con los querellantes y enemistad hacia los inculpados”.
La Cámara rechazó el planteo e hizo una advertencia que también está en la resolución contra Appiani: “Por último, se advierte una vez más que la utilización del instituto de la recusación alegando una causal que en modo alguno se verifica, desnaturaliza los propósitos y fines para los que fue concebido el instituto, configurándose un abuso del proceso que los jueces no deben tolerar, ya que el ordenamiento les impone el deber de dirigir el procedimiento señalando los actos que desvirtúen las reglas o generen situaciones irregulares o de marcada anormalidad”.
Zapata Sigue preso
En el tercero de los fallos, la Cámara rechazó el pedido de excarcelación del expolicía Carlos Horacio Zapata, quien se encuentra con prisión domiciliaria por problemas de salud. Debido al agravamiento del cáncer que padece, el defensor oficial José Alberto Boxler solicitó su liberación, pero los jueces entendieron que el beneficio del arresto domiciliario es suficiente para el tratamiento.
También se tuvo en cuenta “la extrema gravedad de los delitos atribuidos al encausado, así como la sanción que eventualmente le corresponderá, la naturaleza de aquellos, la repercusión que producen son, en principio, un serio impedimento para que pueda acceder a su libertad caucionada”.