La Cámara de Senadores tratará el proyecto de presupuesto para 2015 durante noviembre, con la intención de aprobarlo en lo que resta del mes. Así indicaron ayer fuentes legislativas tras la aprobación que logró la ley de leyes en la Cámara baja.
El Senado tratará el proyecto de presupuesto durante este mes
Sin embargo nada es seguro, ya que pese a tener una composición completa de legisladores oficialistas, la Cámara alta viene de demorar algunos proyectos del Poder Ejecutivo, como ocurrió recientemente con la adhesión al fideicomiso para la compra de ambulancias y patrulleros, situación que ayer intentó destrabar el ministro de Gobierno Adán Bahl al reunirse con el bloque oficialista
La sesión de Diputados no tuvo mayores novedades. Como miembro informante, el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Marcelo Bisogni, fue el encargado de defender el proyecto. “La Ley de Presupuesto es un compromiso y una garantía de previsibilidad para el resto de los actores económicos, por lo tanto es también uno de los pilares para sostener el crecimiento y el posicionamiento que hemos logrado en estos últimos como una de las provincias de mayor desarrollo de toda la Nación”.
Tal como era de esperar, el texto no contó con el acompañamiento del bloque radical, del diputado socialista Lisandro Viale; ni de los legisladores María Emma Bargagna y Enrique Fontanetto, ambos del Frente Amplio Progresista y del Frente Amplio Entrerriano respectivamente.
Si votaron el proyecto los legisladores Claudia Monjo, enrolada en el massismo; y el moyanista Antonio Alizegui, del bloque Frente por la Educación, la Cultura y el Trabajo.
El radical Antonio Julián Rubio criticó que el proyecto contemple un déficit financiero de 1.455 millones de pesos y pese a eso, se autoriza al Poder Ejecutivo a contraer más deuda. Igualmente criticó que se incluyan “megaobras” en vez de priorizar aquellas que mejoren la calidad de vida de los entrerrianos, y atacó el uso de “variables económicas del presupuesto nacional, que no son reales”, aludiendo a la previsión de una inflación anual de 15% y de un dólar a 9,45 pesos, que se corresponden con las variables del presupuesto nacional. Esta metodología de replicar las variables nacionales se ha repetido durante años, y siempre fue objetada por la oposición .
El voto de Monjo
El voto de Monjo fue el más comentado, y se convirtió en objeto de numerosas especulaciones respecto de la razón por la cual la esposa del precandidato a gobernador Adrián Fuertes, un severo crítico del gobierno provincial, había acompañado la medida.
A tal punto llegaron estos comentarios que el mismo Fuertes salió a aclarar la postura de su esposa. Dijo que se vincula con “la responsabilidad institucional de dar a un gobierno que se está yendo el instrumento para que fluya las acciones mínimas e indispensables que afectan la vida de los entrerrianos”.
“Decidimos aprobarlo exclusivamente por una cuestión de responsabilidad republicana. El gobierno que hoy padecen todos los habitantes de la provincia necesita un presupuesto para poder seguir ejecutando sus acciones, aún cuando estas sean escasas y mal planificadas”, subrayó Fuertes.
Y agregó: “Demasiadas piedras en el camino se ponen ellos mismos con su absoluta irresponsabilidad, como para andar nosotros también haciéndole zancadillas”.
En ese marco, consideró que la provincia vive “un proceso irreversible de decadencia moral y política” que se terminará en diciembre de 2015, “cuando este humilde servidor sea gobernador y Sergio Massa se convierta en presidente”.
“Nuestra estrategia es construir y esa es la guía de nuestras acciones. No tenemos problemas personales con nadie. Pero tenemos la firme vocación de ponerle fin a esta degradación absoluta que vive Entre Ríos y para eso estamos planificando con tiempo una plataforma de gobierno que nos permita empezar a sacar a la provincia del pozo cada vez más profundo en el que la están hundiendo”, concluyó.