El exgobernador Urribarri salió al cruce recordándole al actual mandatario provincial que fue electo gobernador gracias a la posibilidad de mostrar una gestión de obras importante y eficaz. "Concordia, la ciudad de la que fue intendente durante ocho años, se transformó absolutamente gracias a los fondos de Salto Grande aplicados por la Cafesg (la comisión que administra esos fondos), y hace dos años que ese organismo no recibe un centavo de parte del Estado nacional", expresó.
En este sentido, Urribarri recordó: "Decenas de obras importantísimas que pudo inaugurar en su ciudad fueron ejecutadas y financiadas a través de la Cafesg y por los programas previstos en el Presupuesto nacional que en esos momentos sumaba e incrementaba obras y no las reducía como ahora".
La polémica podría retroceder muchísimo y repasar las posturas que sostenían Bordet y Urribarri hace tiempo y que pueden interpretarse como contradictorias con sus dichos de hoy. La generalización del uso de buscadores en Internet como Google ya le quitó la novedad a las notas periodísticas que solían titularse "Lo que decía Pepe de Pancho hace cinco años" o "El cambio de opinión de Tito sobre Fito". Al fin de cuentas, parece ser algo propio la dinámica misma de la política, y así como no interesa demasiado la puntillosa textualidad de lo dicho, tampoco el archivo sonroja a nadie. Lo cierto es que de un lado estará el gobernador, y del otro, su antecesor.
Urribarri confirmó hace un par se semanas que competiría dentro de la interna peronista y su afirmación sobre la posibilidad de ser "el último de la lista " de
candidatos, pareció una señal indicando que dejó de lado la posibilidad de explorar una nueva postulación, lo que requeriría dilucidar judicialmente si está habilitado o no para esa posibilidad. Como duda, queda por saber si el congreso del Partido Justicialista, que preside Bordet, se reunirá para modificar su carta orgánica y asegurarle al sector que obtenga un piso del 15% en la elección primaria la posibilidad de integrar las listas de candidatos titulares a diputados y concejales. La especulación se escuchó luego de que la cláusula apuntada a lograr la participación de las minorías se cayera de la reforma electoral sancionada en la Legislatura entrerriana.
Por ahora el escenario probable en la provincia sigue siendo el de elecciones provinciales separadas de las nacionales, con las ya conocidas fechas de abril y junio para las primarias y las generales, previstas en la reforma electoral recientemente sancionadas. Igualmente no pasa inadvertido que algunos sectores cercanos al bordetismo advierten que la caída de la imagen de la gestión nacional y de Macri elimina uno de los dos principales argumentos del adelantamiento. El otro es la fortaleza de la gestión Bordet (medida en términos de imagen) y la falta de referencia nacional del sector del peronismo no kirchnerista, el sector que incluye a los gobernadores. Aunque esa falta de referencia también resulta relativizada, y podría decirse ahora que el sector aún no tiene candidatos, pero sí se ha consolidado en el espectro nacional. Estas perspectivas posiblemente todavía no son claras para el grueso de los ciudadanos. La interna peronista muestra a Bordet por un lado, y al urribarrismo y kirchnerismo por el otro, disputando posiciones sobre la actitud del gobierno provincial hacia la gestión nacional. En ámbitos politizados se habla de otras candidaturas y de acuerdos electorales, pero la corrección política desaconseja trasladar todavía estas conversaciones a la agenda de lo publicado. En realidad, parece lógico que las disputas internas no trasciendan los círculos más cerrados de la política.
No porque no sean importantes seguramente, si se considera que las posiciones se adoptan sobre los principales temas de la vida nacional, sino porque el impacto de la crisis los deja en un confuso segundo plano, en el que el reduccionismo y la banalización de los argumentos constituyen muchas veces la base para pensar que existe una grieta entre los argentinos y que es necesario pararse siempre de un lado u otro; sin dar la posibilidad de pensar que existe más de una grieta o ninguna.
Los ciudadanos de a pie, que se empobrecieron a un ritmo impensado durante dos meses cuando el dólar duplicó su cotización y la inflación comenzó a arrasar los salarios, se ven ahora sorprendidos por la propaganda del gobierno nacional que anuncia que la baja de la divisa norteamericana (un 5,8% en una semana) se debe a la confianza de los mercados internacionales, cuando en realidad lo que se viene es una segunda tanda de una bicicleta financiera que terminará produciendo más pobreza y exclusión.
Desde la Universidad Católica Argentina (insospechada de kirchnerismo) estiman que uno de cada tres argentinos estará en la pobreza en la próxima medición de su observatorio. El dólar cerró el viernes a 38,16 pesos y se explica que las medidas que negocia el Gobierno con el Fondo Monetario buscan restablecer la bicicleta financiera y eso motivó que inversores especulativos reingresaran fondos presionando a la baja el tipo de cambio.
Según trascendió en las últimas horas, el equipo económico de Cambiemos prevé implementar un esquema de bandas de flotación para el precio del dólar con el objetivo de dar mayor certeza a los mercados y atraer inversiones financieras que tendrán la posibilidad de invertir en letras del Tesoro en pesos a una tasa anual de 50%. Una vez dolarizadas las ganancias, no habrá motivo para que vuelvan a fugarlas del país. El escenario de recesión se extiende hasta 2020 y frente a esto, la interna no desata pasiones.