En el inicio de la semana los trabajadores nucleados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) inician un plan de lucha en reclamo por el incumplimiento de las condiciones laborales.
Este martes hay cortes en el servicio de transporte urbano
Para este martes dispusieron una retención de servicios, que dejará a la ciudad de Paraná sin colectivos urbanos, con un corte matinal y otro vespertino: serán entre las 9 y las 11, y las 18 y las 20.
La medida fue adoptada como consecuencia de incumplimientos de larga data, y frente a la supuesta imposibilidad argumentada por las firmas a cargo de la concesión para normalizar las situaciones advertidas por UTA.
“Desde hace bastante tiempo que venimos esperando que se cumplan las condiciones laborales que estamos reclamando. Hace unos dos años que no se entrega la indumentaria para todos los trabajadores, tanto choferes como mecánicos; en este último caso, incluye hasta calzado y pantalón especial por el tipo de labor que realizan”, explicó a UNO el secretario gremial de la Seccional Paraná de UTA, Sergio Groh.
Otro aspecto que detalló pendiente de resolución por parte de las empresas del transporte urbano de pasajeros corresponde a las cabeceras de los recorridos. Algunas de ellas no tienen un lugar para el descanso e higiene de los trabajadores, y otras están en muy malas condiciones. Debería haber, en total, entre 12 y 15 cabeceras, ya que algunas líneas confluyen en el mismo destino final.
Otro punto marcado por el gremio es a raíz del estado de las unidades. “Hay días que faltan coches en las líneas porque se rompen y no son arreglados, y los choferes quedan esperando”, argumentó Groh.
En las calles deberían circular a diario entre 160 y 165 unidades, pero hay días que son mucho menos, aunque esa cifra varía considerablemente.
“Estas situaciones vienen de larga data. Ante los primeros planteos, nos decían que dependía de que finalmente se renueve la concesión del servicio, y entendimos porque no iban a afrontar gastos sin esa continuidad asegurada (se renovó a principios de 2017). Unos meses después vino la reestructuración del servicio; y después un traspaso de choferes de la empresa Mariano Moreno a la firma ERSA”, explicó el dirigente gremial, de modo cronológico.
El incumplimiento, dijo, es similar por parte de ambas empresas que se constituyeron en una Unión Transitoria de Empresas (UTE), que se denominó Buses Paraná, para hacerse cargo de la concesión del servicio.
En ese marco, si bien no descartó la posibilidad de reuniones o acercamientos, Groh confirmó la medida de fuerza para el martes, y aclaró que inicialmente alcanzará solo ese día. “Y durante la semana se definirá cómo seguirá el plan de lucha”, advirtió, en caso de profundizarse las medidas de acción directa.
En este caso, no existe posibilidad de un dictado de conciliación obligatoria, según el gremio, ya que se trata de una retención de servicios por deudas de las empresas.
Negociación paritaria
Mientras tanto, el sector de choferes de colectivos de todo el país se encuentra en una negociación paritaria con las cámaras empresariales.
Vale recordar que horas antes del martes 4 de junio, el Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria ante el anuncio de un paro a nivel nacional de 24 horas debido a la falta de avances en la negociación paritaria con la Federación Argentina de Transporte por Automotor de Pasajeros (Fatap).
En estos días hubo una nueva reunión, sin avances, según confirmaron desde la UTA. La conciliación vence antes de fin de mes.
“El gremio a nivel nacional pide un aumento salarial de lo que es la expectativa de inflación, que el trabajador no pierda con la inflación. Pero no hubo acercamientos porque las empresas sostienen que no pueden dar ningún aumento, y que solo podrían hacerlo si la Nación otorga un incremento en los subsidios”, indicó Groh.
Justamente en la inequidad de la distribución de fondos por parte de la Nación al interior del país, Buenos Aires se vio favorecido con mayores subsidios. Eso permitió que el gremio y las cámaras empresarias acordaran un incremento para los choferes de líneas urbanas en provincia de Buenos Aires y Capital Federal de un 20% al básico, más 16.000 pesos por única vez, como no remunerativo y en tres cuotas hasta septiembre por el desfasaje producido entre enero y mayo. Es decir que corresponde a un reajuste salarial para ese período.
La discusión paritaria para el interior del país debería correr con los mismos parámetros.
La paritaria pactada en 2018 ya venció en marzo.