El jefe de la Side en el gobierno menemista, Hugo Anzorreguy, fue autorizado por la presidenta Cristina Fernández a declarar sin guardar secretos ante la Justicia federal sobre los sobresueldos que aquella administración pagó a ministros y secretarios.
La presidenta Cristina relevó de guardar secreto al ex jefe de la Side de Menem
El decreto presidencial número 1096/2014 fue publicado ayer en el Boletín Oficial con la referencia de la Secretaría de Inteligencia y bajo el título “Relévase a ex titular de la obligación de guardar secreto”.
Especificó que Anzorreguy podrá declarar en el Juzgado Federal Nº2, cuyo titular es Sebastián Ramos, en la causa caratulada “Caro Figueroa, José Armando y otros sobre malversación de caudales públicos”.
En 2003 el entonces presidente Néstor Kirchner había adoptado una medida similar con el jefe de la Side de la Alianza, Fernando De Santibañes, quien debió declarar por el caso del presunto pago de sobornos en el Senado.
Caro Figueroa, ministro de Trabajo en el menemismo, admitió en 2005 que había percibido sobresueldos —“todos los funcionarios políticos los cobrábamos”, dijo—, y está imputado del delito de peculado junto a los ex menemistas Adelina Dalesio de Viola (ex titular del Banco Hipotecario), Elías Jassán (ex ministro de Justicia) y el ex gobernador cordobés Juan Schiaretti.
Este expediente forma parte de la causa principal, que ya fue elevada a juicio oral y público y tiene fecha de inicio el 2 de marzo próximo. En el banquillo de los acusados estarán el senador nacional y ex presidente Carlos Menem, los ex ministros Domingo Cavallo (Economía), Oscar Camilión (Defensa) y Raúl Granillo Ocampo (Justicia), la ex secretaria de Medio Ambiente María Julia Alsogaray y otros cinco ex funcionarios que ocupan cargos en segundas líneas del gobierno menemista. Todos están acusados de peculado, que tiene una pena de dos a 10 años de prisión.
La causa fue elevada a juicio oral por el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, quien sostuvo que el pago de sobresueldos “consistió en la implementación y ejecución de un sistema que posibilitó la sustracción de fondos públicos en forma periódica por parte de distintos funcionarios del Poder Ejecutivo”.
Reservados. Los sobresueldos se pagaron con fondos de gastos reservados que estaban destinados a temas de seguridad y defensa y que se manejaban con dinero en efectivo sin control gubernamental.
El magistrado acusó a Menem de “idear y decidir la puesta en funcionamiento de un sistema ilícito de pago a funcionarios de más alta jerarquía”, de dar las instrucciones para su implementación y de realizar “en forma personal actos ejecutivos concretos de la maniobra especialmente diseñada para la sustracción continuada de caudales de carácter público”.
Cavallo está imputado de una maniobra similar por haber ordenado en una reunión de gabinete entre fines de 1992 y principios de 1993, en la que estaba Menem, directivas a funcionarios para que en sus declaraciones juradas ante la Afip declaren los sobresueldos “en una proporción que les permitiese justificar sus gastos y poder posteriormente alegar que esos montos tenían una finalidad salarial compensatoria”.
La causa se inició porque que en su juicio oral por enriquecimiento ilícito María Julia Alsogaray admitió que cobró sobresueldos.