Lo que distintas instituciones venían alertando al gobierno nacional, lo planteó este fin de semana Unicef: hay cerca de 1,6 millones de niños en el país que no reciben la Asignación Universal por Hijo (AUH), por no cumplir con las presentaciones correspondientes de los certificados de salud y de educación. La cantidad representa cerca de un 40% de los actuales titulares del beneficio –unos 3,9 millones de chicos– que han perdido automáticamente esa acreditación, pese a estar dentro del universo de potenciales titulares del derecho.
La no presentación de la Libreta Universal va dejando en el camino a más niños
Primero se retiene el 20% y luego se quita el beneficio. Unicef advirtió que en el país hay 1,6 millones de niños sin protección social
29 de octubre 2018 · 23:07hs
El informe de Unicef tomó relevancia el fin de semana, y reinstala el debate sobre las condicionalidades establecidas en el programa.
En Entre Ríos, el número de beneficiarios se ha mantenido en los últimos años con altibajos, como una leve caída en 2015, y un nuevo crecimiento a partir del 2017, a partir del empeoramiento de las condiciones económicas y sociales del país. Hay aproximadamente unos 110.000 beneficiarios.
Respecto a quienes no lo cobran, que en el país representa un 12% del total de la infancia, en la provincia serían más de 20.000 niños, siguiendo las proyecciones estadísticas del estudio de Unicef.
A principios del año pasado, Anses había realizado operativos especiales en los barrios –particularmente de las ciudades grandes, como Paraná y Concordia–, para ir en búsqueda de aquellos que perdieron el beneficio, por no cumplimentar la presentación de la documentación exigida. Por ese entonces, a través de iniciativas como El Estado en tu barrio, se avanzó en distintos operativos especiales. "El punitivismo de la AUH –las condicionalidades de escolaridad y vacunación– genera más costos que beneficios, advirtió Unicef, que pidió al Estado nacional a desplegar algún tipo de respuesta.
"Aquí no se ha suspendido el beneficio a nadie", dijo ayer el titular de Anses Paraná Enrique Susevich, ante la consulta de UNO. El funcionario remarcó en varias oportunidades que "la AUH no se la quitó a nadie", y que en distintas localidades de la provincia se llevan adelante distintas acciones del programa El Estado en tu Barrio.
"Hay muchos que no presentan en tiempo y forma, pero por eso se han ampliado los plazos", agregó. En este caso, dijo, para presentar los certificados de escolaridad y de vacunación hay plazo hasta el próximo 31 de diciembre. Rige, según acotó, tanto para entregar la documentación correspondiente a este año, como al 2017 que fue prorrogada.
"Lo que pierden es el 20% que se retiene, hasta tanto se cumpla con la exigencia", precisó Susevich.
En cuanto a una eventual flexibilidad para pagar la AUH sin las exigencias actuales, indicó que para ello será necesario una nueva resolución legal que permita esa modificación.
Además, indicó que desde hace unas semanas ya es posible cumplir con todas las presentaciones, a través de Internet. Caso contrario, como es habitual, hay que requerir turno.
La AUH es una asignación mensual por cada hijo menor de 18 años, que les corresponde a las familias o tutores de menores que estén desocupadas, sean trabajadores no registrados o monotributistas sociales. El valor actual es de 1.694 pesos.
El 80% de esa asignación se cobra mensualmente, y para recibir el 20% restante y seguir cobrando, se requiere una vez al año la Libreta Asignación Universal para acreditar asistencia a la escuela y controles de salud.
Justamente, sobre este punto Susevich aclaró que hay beneficiarios del 2017 que sufrieron ese recorte, pero no la quita del subsidio. "Solo se ha cortado la AUH a quien consiguió un empleo en blanco. Pero por falta de presentación no hemos tenido reclamos".
De todos modos, está claro que los operativos de campo en los barrios apunta a llegar a esos sectores más vulnerables, que muchas veces incluso sufren la falta de vacunas en los centros más cercanos.
Informe
El estudio plantea que con relación a la condicionalidad educativa, "se evidencia un fuerte impacto positivo de la AUH sobre las tasas de asistencia secundaria de los varones elegibles de entre 15 y 17 años. Para las mujeres, no hay un impacto significativo sobre la asistencia. El impacto de la AUH en las tasas de asistencia escolar primaria y secundaria básica es muy pequeño". Así las cosas, sostiene que "la evidencia sugiere que, si bien la AUH no parece suficiente para atraer a las niñas y mujeres jóvenes más vulnerables que todavía están fuera del sistema educativo, sí estaría contribuyendo a mejorar las trayectorias educativas de las que asisten, reduciendo la deserción intra-anual y aumentando las chances de graduarse en plazos no muy alejados de los teóricos. En cuanto a los varones, la AUH estaría colaborando en el aumento de sus tasas de conclusión de la escuela primaria".
En tanto, marcó que el efecto de la condicionalidad en salud parece no ser relevante: "No se registran disparidades significativas entre los destinatarios y no destinatarios de la Asignación con relación al comportamiento vinculado al cuidado de la salud (consultas al médico). Donde sí se observan diferencias estadísticamente significativas es en el modo de obtención de los remedios. En este caso, los hogares que reciben AUH tienen mayores probabilidades de obtenerlos gratuitamente respecto de los no destinatarios del programa".
Ante ello, Unicef planteó al Gobierno la necesidad de eliminar el carácter punitivo de los requisitos y al mismo tiempo "fortalecer el apoyo social con programas intensivos en recursos humanos que ayuden a identificar y responder a la vulnerabilidad y la privación". La alternativa de mínima sería eliminar la reserva del 20% y generar alternativas ante el posible incumplimiento y seguimiento caso por caso. La opción de máxima sería la transformación de la AUH en un programa no condicionado.