La falta de lluvias acelera la pérdida de reservas hídricas

Sin precipitaciones en el sur de la provincia, y apenas 30 milímetros en los departamentos Nogoyá, gran parte de Paraná, Diamante, Victoria y buena parte de Gualeguay, cerró febrero. Según el último informe de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos, la falta de lluvias y el régimen térmico más exigente favoreció un retroceso más rápido de las reservas y en consecuencia, un área más vasta transita estos primeros días de marzo en estado de sequía.

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Preocupa la falta de lluvias y el impacto que acarreará a la economía provincial.

A criterio de la institución, la situación meteorológica “sigue siendo compleja, en el sentido de que no se observan soluciones significativas en el corto plazo”, ya que se observan algunas posibilidades de lluvia aisladas, pero “la oferta de agua prevista es muy pobre”.

“Hemos transitado una campaña gruesa con muchos altibajos”, destaca el estudio del Siber, “con una oportuna recuperación pluvial a mediados de diciembre, la cual se proyectó al mes de enero, pero no logró afianzarse durante el mes de febrero”. Y añade que más allá de que los cultivos de verano no recibirán auxilio en esta primera quincena, se estima que el patrón pluvial tenderá a normalizarse durante el resto de marzo.

El déficit hídrico se concreta en coincidencia con los meses habitualmente de precipitaciones más importantes, en un período que va desde febrero hasta abril inclusive.

Corto plazo

Con un promedio de lluvias superior a los 150 milímetros –y marcas que no superaron los 40 milímetros, en el mejor de los casos–, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) podrían registrarse algunos chaparrones mañana por la noche y el miércoles a la mañana. Persistirán las altas temperaturas, por lo que recién el fin de semana se esperan caudales de lluvias más importantes, con un significativo descenso de las marcas térmicas.