Octubre es un mes particular para la escuela especial Nº 1 Zulema Embon. Ayer, como todos los años, realizaron una muestra de las producciones que se hicieron en el año. Asisten a la institución 130 alumnos desde los 14 hasta los 42 años. La institución tiene dos sedes: una en La Picada y otra que funciona en Villaguay frente a la Plaza Sáenz Peña, en la casa que perteneció a Carlos Mainini, un conocido personaje de la ciudad fallecido en setiembre de 2010. Los estudiantes contaron sus experiencias en los talleres presentados en la vereda.
La escuela Zulema Embon hizo su muestra anual en la vereda
Juan Ignacio participa del taller de herrería y carpintería y dijo a UNO: “Yo voy a la sede que está en La Picada y hace mucho que hago esto, como seis años. El trabajo se disfruta con los chicos y los maestros”. Ayer había por ejemplo parrillas con sus respectivos utensilios de muy buena calidad y presentación.
Jonathan por ejemplo, participa del taller de economía doméstica y cocina. “Hacemos cosas de limpieza y de ayuda en la cocina. Trajimos tortas, pastafrola, alfajores de maicena y budines. Es todo natural”, dijo. Él asiste a la sede de Paraná.
Eliseo asiste al taller de albañilería. “Trabajamos con ladrillos, ponemos techos, hacemos de todo. Cuando terminamos nos ganamos un título, pero todavía me faltan tres años”, destacó.
Variedades
Según contó la directora de la institución, Catia Dreiszigacker, además de los talleres mencionados hay panadería, tambo, granja, huerta y jardinería. Ayer se expusieron variedades de plantines y producciones hortícolas. Estas actividades se hacen todas en la sede de La Picada.
En Paraná hay uno de orientación vocacional, de peluquería, cocina y economía doméstica y también uno muy particular de zapatería. Carlos fue expositor con este último tipo de trabajos y aseguró que si bien empezó hace poco, le agarró la mano y empieza a gustarle el oficio. “Nos especializamos en arreglos de zapatos. Si hay que cambiar una suela, un taco o una parte de arriba nosotros lo hacemos. Tratamos que los zapatos queden como nuevos. Con el tiempo aprendés y en circunstancias es fácil, sobre todo cuando uno quiere aprender”, señaló.
Los alumnos detallaron aquello que hacen todos los días. Ulises por ejemplo aseguró que sabe hacer puertas y que aprendió en el taller de herrería y carpintería.
Por unas horas, hasta el mediodía, mostraron sus producciones y con orgullo dieron cuenta de ellas. Todo forma parte de un proyecto de vida que se conforma a diario, en una búsqueda por alcanzar una salida social y laboral.
Hoy hay feria
Para poder recaudar dinero que le permita a la escuela Zulema Embon afrontar numerosos gastos que tiene a diario, realizarán hoy una feria americana durante la mañana. La misma se realizará en la vereda de Villaguay frente a la plaza Saénz Peña, pero si llueve se hará dentro de la casa que la institución alquila. Se trata de un lugar emblemático para la ciudad: fue la casa de Carlos Mainini, conocido personaje extravagante de Paraná.
La feria de hoy se hará con donaciones. El dinero que se recaude será para gastos diarios como fotocopias e insumos internos.
Se persiguen fines pedagógicos con una capacitación
Según los directivos estos talleres que fueron expuestos, persiguen fines pedagógicos y de formación pero no es lo único que se hace en la escuela Zulema Embon. “Por ser especial de educación integral, hay alumnos de todas las edades. Además de los talleres tenemos áreas estético expresivas que funcionan a la tarde. Una es de Música, otra de Educación Física y otra de contenidos con ejes transversales con sus talleres”, dijo Dreiszigacker, la directora de la institución .
También explicó que se trabaja en la integración y la alfabetización con pasantías laborales que se realizan. En total hay 35 docentes y más los ordenanzas conforman la comunidad educativa que ayer brindó la posibilidad de que se conozcan sus actividades.
“Todos ellos -por los alumnos- van de mañana y dos días hacen extensión de jornadas. Como es una escuela estatal y depende de la Dirección de Educación Especial, no hay cuotas. Algunos, los que pueden, colaboran con la cooperadora”, agregó Dreiszigacker,
Las inscripciones están abiertas durante todo el año. “Ahora comenzamos a recibir más demanda, porque son para el año que viene”, señaló.
Cada producción que se mostró ayer en calle Villaguay tuvo un precio. Hasta se presentaron huevos de granja que son trabajados por los estudiantes todos los días.
Tanto Griselda Salas, vicedirectora de La Picada, como Judit Ramírez, vicedirectora de la sede de Paraná, explicaron que las ventas que se realizaron ayer no tienen que ver con la producción en sí, con la intención de recaudar, sino que se hizo para que se puedan solventar los gastos que se tuvieron al momento de producirlos. “El fin de los talleres es pedagógico, de capacitación, para que se puedan formar”, remató Dreiszigacker.
De todos modos, la escuela tiene gastos permanentes por sus características y deben realizar diferentes actividades para poder solventarlas. Hoy por ejemplo, harán una feria americana.











