Neymar temió que iba a quedar inválido cuando sufrió una lesión en la espalda que lo marginó por el resto de la Copa del Mundo.
La dura declaración de Neymar entre lágrimas
El astro de la selección brasileña lloró el jueves al recordar la jugada en la que se fracturó una vértebra, al recibir un rodillazo de parte de Camilo Zúñiga en el partido por los cuartos de final del Mundial.
"Es difícil hablar ahora sobre una jugada que pasó en un momento tan importante de mi carrera", dijo el delantero, quien guardó silencio durante varios segundos, bajó el rostro y se tapó los ojos con una mano al recordar ese momento. Indicó que si el golpe en la espalda baja hubiese sido un poco más al costado "estaría en una silla de ruedas" ahora mismo.
"Dios me bendijo" para evitar que sucediera algo peor, señaló el goleador en Teresópolis, antes de viajar a Brasilia para acompañar a sus compañeros de la selección el sábado en el partido ante Holanda por el tercer puesto.
El ariete de 22 años se quejó por la falta que recibió de Zúñiga, pero dijo que el futbolista colombiano lo llamó para disculparse.