La firma de ambos documentos fue informada por el canciller Héctor Timerman, quien encabezó la delegación argentina ante la Cumbre Iberoamericana que sesionó el lunes y este martes en la ciudad mexicana de Veracruz, y se mostró "profundamente satisfecho" por el resultado obtenido por la Argentina en el encuentro.
La Cumbre Iberoamericana apoyó a Argentina por Malvinas y contra los fondos buitres
A través del "Comunicado especial sobre reestructuración de deuda soberana", los gobernantes reivindicaron "el derecho de todo Estado de alcanzar acuerdos con sus acreedores que no comprometan su desarrollo ni el bienestar de sus pueblos, en consonancia de su política nacional, sin interferencias ni planteos de grupos minoritarios de tenedores de títulos no reestructurados".
También expresaron su "voluntad de seguir trabajando en mecanismos multilaterales, involucrando a todas las instituciones competentes sobre la reestructuración de la deuda soberana".
Al respecto, destacaron, entre otros, "el proceso de negociaciones abierto a partir de la Resolución 68/304 de la Asamblea General de Naciones Unidas”.
Por otra parte, en el "Comunicado especial sobre la cuestión de las islas Malvinas", los países iberoamericanos reiteraron el histórico respaldo al pedido de que los gobiernos de la Argentina y el Reino Unido "reanuden, a la mayor brevedad posible, las negociaciones tendientes a encontrar una pronta solución a la disputa de soberanía".
Asimismo, manifestaron su rechazo a las acciones unilaterales de exploración y explotación de recursos renovables y no renovables que el Reino Unido ha venido llevando adelante en el área en disputa.
En ese sentido, los firmantes recordaron "los llamamientos de la comunidad internacional a abstenerse de adoptar decisiones que entrañen modificaciones unilaterales en la situación de las Islas Malvinas de conformidad con la Resolución 31/49 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que en nada contribuyen para alcanzar una solución definitiva de la disputa territorial".
Además, resaltaron que la presencia militar en el área de disputa vulnera resoluciones de la Organización de Naciones Unidas.
Timerman afirmó al término de la cumbre que este apoyo unánime de los países iberoamericanos "es de significativa importancia en momentos en que en las Naciones Unidas se están realizando preparativos para iniciar, a partir del 1 de enero de 2015, la negociación de un marco legal internacional para los procesos de reestructuración de deudas soberanas".
Destacó que cada vez son más países los que se pliegan a la propuesta presentada en septiembre pasado por el Grupo de los 77+China para que el organismo apruebe una normativa general, "como lo ha hecho con las armas nucleares y con tantos temas importantes".
"Este tipo de situaciones, donde grupos inescrupulosos compran bonos que se sabe que no se están pagando para llevarlos ante un juez, como el de Nueva York -en alusión al magistrado Thomas Griesa- y sacar un rendimiento de 1.300 por ciento es algo que realmente compromete el desarrollo de los pueblos, que fue el motivo de fondo de esta cumbre", dijo.
Fuente: Télam