Cientos de miles de abejas aparecieron muertas en la zona del puente general San Martín, entre la cabecera oeste y el puesto de Gendarmería Nacional en Gualeguaychú, en un episodio que todavía no encuentra una explicación razonable.
Investigarán la mortandad de miles de abejas en Gualeguaychú
El hecho fue denunciado el viernes por la tarde en la oficina de Medio Ambiente de la Municipalidad del sur entrerriano. En esa dependencia se hicieron presentes representantes de la Asamblea Ambiental Ciudadana, acompañados por el apicultor afectado por el extraño fenómeno.
Consultada por este tema, la titular de Medio Ambiente de esa localidad, Noelia Indart, explicó: “No tenemos un protocolo específico para actuar en este tipo de casos”. La funcionaria admitió que al conocerse la denuncia por la inexplicable mortandad de abejas se tomaron fotografías, muestras y se labró un acta en el lugar. Indart dijo desconocer el total de insectos muertos, pero señaló que afectó “al 30% de la población”, de las colmenas que posee el apicultor perjudicado.
“Mañana -por hoy- vamos a tomar una determinación. Pero en principio lo comunicaremos a la Secretaría de Ambiente de la Nación y de la Provincia”, manifestó.
Asimismo la funcionaria consideró: “No es común que algo así suceda, porque nosotros tenemos un protocolo para actuar en situaciones referidas a cursos de agua, pero no con abejas”.
Colchones de abejas muertas
El dirigente de la Asamblea Ciudadana Ambiental, Juan Veronesi, describió el escenario que encontraron en el colmenar devastado por circunstancias que se tratan de investigar. “Había un colchón de abejas muertas fuera de las colmenas. No es un envenenamiento interno, sino que se trata de un factor externo. Se recolectaron abejas para analizarlas, pero en primera instancia descartamos que se trata de fumigaciones cercanas. Debe existir otra causa”, estimó.
Veronesi adelantó que deben acordar el lugar donde se realizarán los estudios, aunque es una decisión que se tomará en forma conjunta con autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente. El principal damnificado por la masiva mortandad de abejas es José Heft, apicultor de la zona y quien quedó seriamente complicado al perder una buena parte de su producción anual.
“Se murió entre el 30% y el 40% de la población, todas quedaron afuera del colmenar. Cada colmena tiene aproximadamente 60.000 abejas, en total son 100 colmenas”, detalló Veronesi.
Más allá de que no se tienen precisiones sobre el fenómeno, el asambleísta no descartó que la pastera UPM ex-Botnia pueda tener alguna vinculación con lo sucedido. “Pienso que pudo haber sido una oleada de gases tóxicos emanados por la pastera Botnia. Supongo que pudo haber sido ácido sulfhídrico”, acotó.
Emprendimiento trunco
El apicultor José Heft, cuyo emprendimiento vinculado a la producción de miel quedó trunco, no le encuentra explicación a la llamativa muerte en masa de sus abejas. El centenar de colmenas se encuentra ubicado a unos 400 metros del puente internacional General San Martín, pero tras lo sucedido su propietario tendrá que empezar de nuevo.
“Lo venía controlando”, dijo Heft al recordar el hecho. “De golpe aparecieron un montón de abejas muertas. Como se trata de miel orgánica es libre de fumigación, entonces no nos explicamos lo que pasó”, señaló el productor. Detalló que los insectos muertos pertenecen a las casta de las pecoreadoras. “Levantan el polen, antes de la extracción”, aseguró.
“Por la época la mortandad de abejas no es natural, entonces la única explicación lógica es que la causa sea Botnia”, argumentó el apicultor.
Al calcular las pérdidas que dejó este mal trago señaló: “Entre 20 y 30 kilos de miel, que es lo que se recolecta una vez por año entre febrero y abril. Tengo 1.000 colmenas en la zona, pero este colmenar me dio pérdidas. Tengo que producir entre 18 y 20 kilogramos para salvar el gasto, pero no creo que llegue ni a 10 kilogramos”.
Plazo
El 2 de abril venció el plazo de seis meses de negociación que tenía Argentina y Uruguay para resolver la nueva controversia por la autorización unilateral del vecino país de aumentar la producción anual de la pastera finlandesa UPM. El Estatuto del río Uruguay establece ese plazo, que una vez vencido, habilita a las partes para acudir a la Corte Internacional de Justicia de La Haya. Es un misterio si este será el camino o la estrategia que adoptará la cancillería argentina.