Vanesa Erbes / De la Redacción de UNO
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Iban a juntar plata para viajar, pero decidieron ser solidarios
Juan Galfano es empleado de un comercio y también trabaja en un gimnasio. Le gusta viajar y ya realizó varias travesías por distintos lugares del país. En busca de nuevos paisajes escaló montañas, surcó caminos llanos, acarició la nieve, cruzó ríos y arroyos, contempló puestas de sol en las diversas geografías que otras provincias ofrecen.
Con la mochila casi lista, su nueva meta es llegar a Tucumán, adonde piensa ir con un grupo de amigos. Como viajar supone una inversión extra, decidieron organizar un festival para recaudar los fondos que necesitan para comprar los pasajes y garantizarse la estadía en esa zona del norte argentino. Pero mientras planificaban el evento se enteraron de las tareas que lleva adelante el grupo solidario Un cielo nuevo, que se reúne en calle Italia 370, en la Iglesia La Piedad, los jueves y viernes de 17.30 a 20, y que entre sus actividades se dedica a brindarles un café, una chocolatada, un alimento o un abrigo a personas que se encuentran en situación de calle. El grupo también visita los sábados el hogar San Camilo y los domingos va al hospital San Martín a acompañar a los enfermos.
“Creo que todos tenemos aunque sea un poquito de conciencia social y moral y habitualmente cuando salimos a la calle o prendemos el televisor nos encontramos con realidades que son muy conmovedoras. Siempre dan ganas de ayudar, pero a veces uno no se sabe cómo hacerlo”, contó a UNO Juan, y agregó: “En medio de la organización del festival, hace más o menos un mes, se nos ocurrió generar algo copado y nuestra idea del viaje dio un giro de 180º y se transformó en una iniciativa para ayudar a otros: pensamos que en lugar de juntar dinero con fines personales, podíamos apelar la solidaridad de la gente y pedir como entrada alimentos no perecederos, ropa o juguetes”.
En este marco, comentó: “Es la primera vez que nos embarcamos en un proyecto de este tipo, y como mi hermano y otro conocido están en el grupo Un nuevo cielo, decidimos entregarle a ellos lo que juntemos para que lo administren y efectivamente le llegue a quien más lo necesita”.
El encuentro fue ayer desde las 16 en un local de Alem 245, y convocó a un importante número de amigos, decididos a compartir, pasar una linda tarde y colaborar con aquellas personas en situación más vulnerable. “Fue un evento social, artístico y solidario y los grupos de música que participaron y hasta quienes nos trajeron el flete lo hicieron sin cobrarnos. Nosotros igual vamos a viajar a Tucumán el próximo mes, donde también pensamos ayudar a familias carenciadas”.
“A mí me gusta la aventura, hacer trekking, ir de mochilero. Al dinero del viaje lo vamos a pagar de nuestro bolsillo, con nuestro trabajo particular, pero estamos contentos de que este evento que combinó diferentes matices artísticos haya tenido como único fin ser solidarios y divertirnos haciéndolo”, dijo a modo de conclusión.