Todos los conocían como Batata en Bajada Grande, porque la partera que lo recibió en su llegada al mundo reparó en que era gordito y coloradito, por eso lo bautizó con el apodo que llevaría durante su corta vida. Hoy se cumplen 14 años de la desaparición de Elías Gorosito, el caso que se convirtió en un ícono de la violencia policial en la ciudad de Paraná y que sigue doliendo entre sus familiares por no saber qué sucedió con el muchacho que hoy tendría 34 años. Según se pudo reconstruir en los dos juicios que tuvieron en el banquillo de los acusados a tres policías, a Elías lo vieron por última vez en el barrio Mosconi, cuando tres policías de la comisaría quinta bajaron de un patrullero y lo levantaron en las inmediaciones de la escuela Esparza. “Tenemos mucha tristeza, pero más por mi mamá, que es la que siempre anduvo peleando y se murió sin saber qué pasó con Elías”, recuerda Paola, una de las 10 hijas de la pareja que conformaban Cristina Silaúr y Rudecindo Gorosito.
Tres de ellos ya no están: Leonel, el hijo mayor falleció en 1996, cuando era custodiado por un policía en el hospital San Martín. A Jonathan, lo encontraron muerto el 22 de julio de 2011 en una comisaría de Las Heras, en la provincia de Santa Cruz y Elías, por quienes siguen reclamando justicia. Después de tantos años de angustia y de las tragedias que atravesaron a la familia, Paola asegura que no está conforme: “Si bien los culpables del crimen de Elías están presos, el no saber dónde están los restos de Elías y que mi mamá se haya ido sin saber nada nos llena de dolor”.
La mujer relata que en los momentos de flaqueza se apoya en los suyos y surge con más fuerza el recuerdo del Batata. “Queremos que los policías nos digan qué hicieron con los restos de mi hermano”, acotó en diálogo con UNO. Luego de dos juicios, fueron condenados a 12 años de prisión Diego Javier Salvador, Lisandro Luis Rodríguez y Jesús Salvador López.
La carta al Papa
A su modo, casi en silencio, la familia Gorosito no pierde las esperanzas de que se conozca el paradero de Elías. La forma que encontró Paola de canalizar esta inquietud fue enviándole una carta al papa Francisco y está convencida de que tendrá una respuesta. “La carta se la envié en agosto para que él pida por mi hermano y para que nos devuelvan los restos. Hasta ahora nunca obtuve una respuesta. A la carta la llené en la Catedral de Paraná y lo hice más que nada para que mi madre pueda descansar en paz”, explicó. La hermana de Elías afirmó que también tratará de acercarse al Santo Padre cuando confirme su visita a nuestro país.
Paola tiene buena memoria y dijo que la última vez que lo vio a Elías fue durante los primeros días de febrero. Vuelve en un viaje imaginario y recuerda que su hija estaba por cumplir años y ambos planeaban hacer un asado para el festejo. “Subió a la Gregoria Pérez y ese día bajaba una camioneta de la Policía; él los saludó, pero desde el móvil recibió como respuesta una amenaza”, rememoró. “Yo le decía: ‘Batata, no vaya a ser que te maten’ y sin más se fue caminando”, concluyó.
Hoy se cumplen 14 años de la desaparición de Elías Gorosito
Lo vieron por última vez en 2002, cuando lo levantaron en un móvil policial. Su hermana quiere que se sepa dónde están sus restos.
13 de febrero 2016 · 08:46hs