El comportamiento del gobierno nacional frente a la campaña electoral plantea algunas dudas que, tal vez, puedan responderse con los resultados de agosto y de octubre en la mano.
La pregunta que deja Durán Barba
18 de julio 2017 · 08:52hs
El skecht The House of Grieta del ciclo televisivo de Jorge Lanata muestra, en su tibio cuestionamiento al oficialismo actual, a un Mauricio Macri totalmente sometido a los consejos del consultor político ecuatoriano Jaime Durán Barba, basándose en una idea generalizada de cómo se toman las decisiones políticas en el nucleo del macrismo. Durán Barba es el campeón invicto y sus estrategias- entendiendo que las decisiones del Gobierno respondan a estas- ponen a un amplio sector, si no a todo el electorado argentino, frente a un espejo en el que no es sencillo mirarse.
Los manuales tradicionales de la política jamás aprobarían un recorte furioso de pensiones a discapacitados en la previa electoral, y menos aún incumplir la promesa de su restitución a corto plazo. Tampoco aprobarían la represión televisada a los trabajadores de Pepsico. O la idea del Presidente de sacar del cargo por decreto a la procuradora Gils Carbó para poner a alguien que tenga coincidencias con el Gobierno. O la entrega del Arsat 3, entre otras medidas. Lo tradicional era hacer las cosas desagradables al comienzo, como se hizo con el corte del plan Conectar Igualdad, por ejemplo. Pero ahora, a menos de un mes de las Primarias, el macrismo ejecuta políticas que se suponían piantavotos como si nada lo afectara.
Durán Barba no es ingenuo ni mucho menos, y la estrategia comunicacional de la alianza Cambiemos viene siendo muy exitosa desde 2015. La pregunta, no tan profunda, es si (simplemente) el macrismo evalúa que las denuncias de corrupción contra el kirchnerismo son argumento suficiente para superar este compromiso electoral, pese a que ya van para dos años de gobierno y no han resuelto los principales problemas que diagnosticaban en 2015 (tal como lo reconocen incluso los mismos dirigentes del oficalismo nacional); o si esas decisiones políticas son en realidad medidas esperadas por numerosos electores. Si, vistos de una perspectiva individual, muchos argentinos entienden que son cuestiones que deben hacerse para que yo -vecino/ contribuyente/individuo- esté en una mejor posición relativa.