Las calles de la capital provincial son un espacio para las intervenciones artísticas. Afiches y pósters son parte del paisaje cotidiano Las paredes, las columnas, las garitas de las paradas del transporte público y los edificios de Paraná son para los artistas del arte callejero vehiculizadores de mensajes y expresiones.
El arte callejero en Paraná: una forma de interpelar
Por Araceli Sosa
Los afiches pegados en diferentes lugares de la vía pública tienen algo para decir, preguntar, y tienenen muchos casos la intención de interpelar. El arte emergente se hace presente desde distintas intervenciones y el paste up es una.
Agustina Waltter junto a Milagros Burgos hace Paraná Paste Up, una iniciativa artística autogestiva cuyos mensajes tienen una íntima relación con lo que sucede en la vida cotidiana. A través de la técnica paste up pegan afiches, pósters o stickers en las paredes. Waltter, además de ser parte de este proyecto también comenzó en 2018 con Paraná te canto algo.“Hace dos años atrás con el gobierno del macrismo, donde predominaban las políticas públicas neoliberales, se perdían derechos que teníamos y había ajustes que impactaban en la vida diaria, tuve la necesidad de poder compartir o comunicar lo que me pasaba”, sostuvo a Escenario la artista callejera Waltter.
En los afiches, el negro y blanco son los colores predominantes donde el mensaje se desprende de la música. Puntualmente las frases, que como característica principal son sintéticos, claros y concisos, devienen de fragmentos de canciones del rock nacional y de artistas como Trueno, Sara Hebe, entre otros.
En Spotify
Paraná te canto algo al tener vinculación con la música lo que se plasma en las paredes, también ofrece una playlist en Spotify.
Necesidad de expresar
La situación de pandemia también atraviesa los mensajes de Waltter, y entre los afiches que se pueden encontrar en las paredes de los edificios se destacan frases como “Cuidate, el protocolo sos vos” y “Lxs que se quieren se cuidan”.
Con respecto a estas últimas frases plasmadas en los afiches, Waltter indicó: “A mí me gusta la polìtica, hay muchas formas de hacer política y el arte es una de ellas”. De esta manera, la visión del mundo y la toma de una postura frente a determinadas situaciones, muchas de ellas injustas, se hace evidente en ese arte callejero.
“Es hacerme cargo del mundo en el que vivimos y asumir una postura política frente a un montón de situaciones. No me es indiferente lo que pasa” señaló la joven. Por lo cual destacó que actualmente no es posible pensar un mundo sin pensar en el feminismo, en lo ambiental, en cómo son los vínculos y qué se quiere hacer.
Ante la relación que muchas veces se tiene sobre los museos o las muestras como espacios donde es visible el arte, aunque con cierto carácter elitista, Walter afirmó: “Siempre me gusta disputar el sentido de quiénes pueden producir arte. Es decir, parto desde el concepto de crear con lo que tengo a mi alcance, dar uso a lo que está en desuso”.
También se refirió a la necesidad de democratizar los conocimientos y poner a la vista de todo el mundo una expresión. En este sentido, añadió: “Hay un montón de personas que no acceden a museos, muestras, universidades y en cambio en la calle está todo el mundo, en la calle está el indigente, el profesional, el estudiante, les trabajadores y es como democratizar la autogestión del conocimiento. Es decir, yo sé hacer esto y ponerlo a la vista de todos”.
Afiches creados por Walter con mensajes como Googlea empatía y Cuidate, el protocolo sos vos aparecen en la calle.
Arte colaborativo
Waltter sostuvo que el arte que realiza es popular y que se moldea y se construye en virtud de los hechos que suceden a diario.
Junto a Milagros Burgos, quien también tiene su proyecto Mostras de la lleca (donde realiza figuras feminizadas con mujeres con consignas feministas), “pensamos Paraná Paste Up, donde la técnica es mojar un papel y pegarlo en la vía pública, para agruparnos y gestionar mejor los recursos”.
La artista callejera también manifestó que cuando han salido a la calle a realizar sus intervenciones artísticas han debido argumentar lo que estaban haciendo. “Muchas veces ha pasado que hemos tenido que explicar a la Policía que no es vandalismo lo que hacemos sino que es arte, y poder decir qué significa el arte callejero, el cual es disruptivo en términos del academicismo que revisten las artes. Lo que hacemos con Mili es transformar lo que nos sucede y habitamos las calles por fuera de las instituciones entendiendo que el saber académico no es el único” afirmó.
Cuando fue el debate por la legalización del aborto legal las calles se volvieron la escena donde desde el arte callejero se manifestaban expresiones tanto en defensa como en contra. “Nosotras pegábamos y nos tapaban, pero eso era interesante porque era el diálogo en la calle” sostuvo la artista.
Agus Recortada
Diferente a lo que hace para Paraná te canto algo, Waltter también realiza collages donde combina colores, formas, texturas y tipografías con revistas viejas. En esa combinación, aparece lo analógico por el uso de la revista en sí mismo y lo tecnológico porque después tiene un proceso de digitalización.
En este sentido, se trata de “crear desde cosas que para la gente es basura y están en desuso”, es otra técnica que moviliza a la artista para diseñar sus piezas bajo la denominaciòn Agus Recortada.