Una vez más, Coty Hernández hizo bailar a todos los paranaenses con sus cumbias parranderas. El cantante con esencia de barrio que pasó por Luz, Cámara y a Jugar realizó un show exclusivo en Monet's, de la mano de Kiko DJ.
Coty Hernández hizo vibrar la noche paranaense
Por Lautaro López
COTY FUE TAPA DE UNO ENTRE RÍOS
Coty llegó con un repertorio de temas que repasó los temas más importantes de la carrera como solista y además sonaron en la noche de Paraná los nuevos, temas que salieron durante la pandemia como El Mismo Aire, La Mejor Versión de Mí, entre otros.
El cantante llegó a la ciudad con entradas agotadas y un evento único para los amantes de la movida tropical que tiene la agenda completa para el mes de octubre. El 16, previo al día de la madre estará Rocio Quiroz y luego el 23 lo harán Los Bam Band, banda que también pasó por Luz, Cámara y a Jugar.
LA HISTORIA DE COTY
La historia de la voz de la cumbia santafesina es rica en humildad, experiencias y enseñanzas de todas las barreras que tuvo que atravesar, entre la odisea de los viajes y las distintas inundaciones que tuvo que sobrellevar a lo largo de sus años, junto a su familia.
UN CANTANTE CON ESENCIA DE BARRIO
Coty Hernández, disfruta de un presente distinto donde expone sus 30 años en la movida tropical en la política, en busca de ayudar a los que más necesitan, su espejo de vida y algo que le tocó atravesar en su infancia, sabiendo y teniendo en claro el costo de ganarse el pan día a día.
El solista abrió las puertas de su casa, en el corazón del barrio, con la humildad que los caracteriza presentó a su familia, sus hijos y nietos, para luego contar con lujos y detalles los pasos de su carrera, que comenzó con Los Bucaneros, a los 13 años, cantando y disfrutando de la música para luego seguir su camino en la Pandilla 420, Grupo Cali y Grupo Alegría, donde fue la voz por varios años hasta llegar a lo que hoy es.
Coty repasó sus inicios, con la camiseta de Unión puesta: “Me crié en la isla, las enseñanzas que uno fue adquiriendo con el correr de los tiempos son muy importantes. Aprendí muchas cosas en la costa y una de ellas es tocar la guitarra, con el efecto espejo, al ver a mis vecinos. Fue algo loco y con el correr de los años me di cuenta. Vivimos muchas inundaciones con mi familia, donde nos tocaba dejar el rancho y cruzarnos a la circunvalación para acomodarnos. En mi infancia fui vendedor de cubanitos, feriante y laburante de toda la vida, pescador y cazador de oficio”.
Y luego siguió contando cuándo fue el día que se animó a cantar, algo que ya hacía en la isla junto a las peñas: “Una de las tantas inundaciones fue un punto importante en mi vida. En ese tiempo hacían bailes en el anfiteatro de la zona sur, el espejo del lago hacía que el sonido llegará mejor a la zona donde vivíamos y uno se moría por ir a disfrutar de esos lugares y uno hoy se dice como son las vueltas de la vida, desde los 18 años estoy en este hermoso camino de la música. La gente de la costa es muy particular, los domingos era de rancho, empandas y guitarras. En una de esas tantas movidas unos visitantes me escucharon cantar y metimos una hermosa relación que me invitaron a cantar a Los Bucaneros”.
Los caminos del artista en los escenarios se inician en su adolescencia, con la primaria sin terminar ya que la vida lo obligó a salir a poner el lomo por la familia, y con la complicidad de su mamá, salió a su primer show.
“Mi viejo no me dejaba ir a los bailes y mi vieja fue cómplice de mis inicios, hicimos un arreglo que iba a cantar y volvía antes que papá se levantara para ir al puerto. Toda mentira tiene patas cortas y un día se enteró de lo que hacía, cantaba en Los Bucaneros, en esa banda el plomo era Leo Mattioli, fue un hermoso inicio y estuve dos años con ellos. A los 15 años me fui con la Pandilla 420, luego con Grupo Cali, de coro y güirista”.
El giro inesperado para Adrián Coty Hernández se da con su llegada a Grupo Alegría, del recordado Osvaldo El Abuelo Raggio en la década del 90. “Mi carrera profesional dio inicio en Grupo Alegría, donde tuve nueve años con Osvaldo Raggio, luego me dijo que me abra y su visión me llevó a ser solista. Siempre me acuerdo de él y le rezo por todo lo que me brindó”, comentó el cantante.