En el documental Vuelo nocturno, que se estrenó ayer, el cineasta Nicolás Herzog, que vivió durante un tiempo en Concordia, recupera un episodio olvidado del paso de Antoine de Saint-Exupéry por el palacio de San Carlos en aquella localidad donde conoció a dos niñas que habrían inspirado el personaje central de El principito y algunos otros de aquel relato.
Cine: la conexión concordiense de Saint-Exupéry
"Vuelo nocturno" recupera un episodio olvidado del paso del escritor por el palacio de San Carlos
5 de agosto 2017 · 09:41hs
Una serie de discos de pasta que Antoine de Saint-Exupéry le envió a su compatriota, el cineasta Jean Renoir durante 1941, sirven para reconstruir la relación que, dos años antes inició el escritor y aviador con las llamadas "princesitas argentinas" Edda y Suzzane Fuchs, en Concordia, que terminaron como personajes del capítulo Oasis de su libro Tierra de Hombres. Mucho se ha hablado a lo largo de la historia de diferentes anécdotas de Saint-Exupéry en su estadía en la Argentina, que podrían -releídas por vecinos de esos lugares-, ser las que lo impulsaron a escribir El principito, su obra más exitosa, sin embargo Herzog, en su recorrido detectivesco, logra reunir las pistas y pruebas suficientes como para confirmarlo de una forma muy original.
Herzog, que con Orquesta Roja demostró tener un ingenio sorprendente, y dio lugar a múltiples reconocimientos, recorre esta vez uno y otro lado del Atlántico -paisajes de Argentina y Francia- donde el aviador y escritor vivió y dejó una marca que muchos años después devino en leyenda muchas veces incomprobable. Orquesta Roja fue un documental sobre el Comando Sabino Navarro, un falso grupo guerrillero que decía tener conexiones con los zapatistas, inventado por viejos militantes sociales durante la crisis de 2000 también en Concordia, que terminó siendo solo una puesta en escena.
Saint-Exupéry llegó a la Argentina el 12 de octubre de 1929, como director de Tráfico de la Aeroposta Argentina, empresa dedicada al transporte de correo y de pasajeros, filial de una similar de su país, permaneció solo 15 meses, y más allá de residir en Florida al 200, estaba permanentemente volando a la Patagonia, no obstante también pasó breves períodos en otras localidades.
Vuelo nocturno es una película construida en base a las historias de dos palacios muy lejanos entre sí, uno en San Carlos, en Concordia, el otro en Saint Maurice-de-Rémens, Francia. "Es una historia espejada. La primera frase de la película habla de una construcción en espejo. No solamente la de dos castillos uno aquí y otro allá, sino también la de un espejo de su propia historia en ese mismo lugar, él ve en esa historia algo reflejado de la de Saint Maurice", señaló Herzog a Télam.
De Saint-Exupéry se cuentan varias historias relacionadas con la Argentina referidas a la posibilidad de haber imaginado El principito en un hotel de Ostende.
"Todo pueblo o lugar por el que pasó se relaciona de inmediato con el nacimiento de El Principito. Hay quienes dicen que en un golfo de Chubut él vio la panza de una boa donde imaginó el sombrero y en Francia me contaron que en realidad eran los reflejos en una estufa a gas en la casa de Saint Maurice, que sugerían algo similar y él siempre veía una boa", opinó el realizador del documental. No obstante, destacó que su "relación" con el escritor comenzó en el palacio San Carlos. "Arranca ahí, es el punto de partida, lo sociológico, que también está en Orquesta Roja, enamorarme un poco del mito y cómo se construye a partir de lo social, pero después me interesó mucho el personaje. Sabía muy poco de él, más allá de haber leído El principito, como la mayoría, porque no es un tipo archiconocido. La academia no lo ha tomado, entonces el resto de su obra que es muy rica, incluso hasta mejor, no tiene dominio público. Me metí por ese lado. Es un gran relator de la guerra, construye un poco su humanismo, su punto de vista sobre la vida entre guerras, y su obra está teñida por esa impronta", manifestó.
En el caso de Vuelo Nocturno no hay solución de continuidad entre lo documental y lo recreado. Se trata de un documental que se asemeja a la ficción. "El documental es el género que más se enriqueció en los últimos tiempos. Mi próximo proyecto es ficción pura, pero el camino que vengo haciendo por el género me permitió experimentar cosas por fuera de lo clásico, pero tampoco soy ajeno a recurrir a las entrevistas", comentó Herzog.
Consultado sobre cómo se hace para entusiasmar al espectador con un documental, opinó: "Ese es un tema muy difícil de responder, sin embargo la cuestión es cómo se fortalece una industria a partir de construir espectadores para un cine propio. Corea tardó 15 años en llegar a un 70% de espectadores para el cine nacional. Acá es muy complejo. Aún así tenemos unas 150 películas al año y en la cantidad sale calidad, la vía digital documental... hay de todo. El problema es al terminar la película y preguntarnos qué pasa, terminamos estrenando en pocas salas, si nos va bien en festivales... Vías alternativas".