Enzo Affranchino nació el 5 de mayo de 1981 en Curuzú Cuatiá, Corrientes. Jugó al fútbol en Huracán y en San Martín y compitió durante mucho tiempo en taekwondo y llegó a la Selección. En 1999 se mudó a Libertador San Martín donde se recibió de profesor de Educación Física.
Enzo Affranchino descansa en Paraná y piensa en China
Mientras estudiaba comenzó a trabajar en Universitario como preparador físico y luego fue parte del cuerpo técnico de Atlético Paraná donde estuvo cuatro años. Comenzó a dirigir en Cultural de Crespo los juveniles y coordinaba todas las divisiones inferiores. Ahí “le picó el bicho” por dirigir y luego de un diálogo con Tony Fontana se decidió definitivamente.
Hizo el curso de entrenador. Dirigió un interinato en Paraná donde luego se radicó en 2011 para ser el coordinador de las Divisiones Inferiores de Belgrano. Luego fue gerente deportivo de Belgrano de Paraná.
Se puso el buzo de DT en Recreativo, lo que era Universitario, en la Liga Diamantina. En 2018 surgió el desafío de seguir su carrera en el exterior y viajó a China donde continúa hasta la fecha. Se sumó a Liupanshan High Schools una escuela secundaria con 6.000 estudiantes en la ciudad de Yinchuan, provincia de Ningxia donde enseña la parte física y dirige.
Además capacita a docentes y entrenadores seleccionados por el Ministerio de Educación de la Provincia.
—¿De qué equipo sos hincha?
—Me llamo Enzo y me lo pusieron por Trossero así que imaginate. De Independiente.
—¿Un club?
—Universitario de Deportes, ahí me decidí por esto. Empecé como masajista, lo que no tuve como jugador lo tuve como masajista. Fue el enriquecimiento
más grande que tuve como profesional. He escuchado charlas, he presenciado peleas y he aprendido mucho de eso.
—¿Un triunfo?
—El pasaje de las semifinales
con mi equipo de China. La escuela donde trabajo nunca había ganado un partido en 10 años de historia. El primer año que
trabajamos pasamos de fase y el segundo llegamos a la final. Ese día me dijeron todos: ‘con este equipo siempre perdemos, hemos probado muchas veces,
así que hoy que jueguen todos y cambiá el portero porque la semana que viene es de exámenes’. Y los exámenes allá son muy duros, si querés estudiar Medicina después de la Secundaria, tenés mque sacar entre 9 y 10. Ganamos 2 a 1 el partido y después los chicos me dijeron que no sabían si se iban a poder presentarse a la final porque no se podían cambiar las fechas de exámenes. Esas cosas pasan a menudo.
—¿Un equipo?
—El Independiente de la temporada 88/89, el último campeonato de Bochini. Alfaro Moreno
era mi ídolo en ese equipo.
—¿Un compañero con el que
compartiste vestuario?
—El Dani Barcos. Con Dani
viajábamos todos los días y compartimos muchas cosas.
—¿Un cancha?
—La del club Huracán de mi ciudad.
—¿Cuál fue el gol que más gritaste?
—Tengo dos, el de Pusineri a Boca en 2002 y el de Caniggia a Brasil en el Mundial de 1990.
—¿Cuál es tu top five de deportistas argentinos?
—En este orden: Maradona,
Ginóbili, Messi, Pareto y Nalbandian.
—¿Y tres del mundo?
—Maradona, Jordan y Messi.
—¿Para qué sos bueno?
—Para administrar equipos de fútbol.
—¿Qué te gusta hacer en los momentos libres?
—Escuchar música en vivo en algún lugar.
—¿Lo hacés en China?
—Casi siempre. En todos los bares hay música en vivo, a la noche o a la tarde. Acá en Argentina me gusta ir a recitales.
—¿A qué cosas le tenés miedo?
—A cualquier cosa que le haga
daño a mi hijo.
—¿Qué cosas te sacan?
—La gente que tiene un instrumento de poder y lo usa para
engañar a la gente.
—¿Qué cosas te hacen reír?
—Los chistes tontos.
¿Cuál fue tu peor compra?
—Una banqueta color rojo que
no calza en mi casa. Lo hice pensando que algún día iba a tener
una barra. Hoy no sirve de nada.
Molesta.
—¿Cuál fue tu primer sueldo y
en qué lo gastaste?
—A los 13 años. Me llevé 10 materias y mi mamá me llevó a una distribuidora a trabajar gratis. Le dijo a la dueña “él se llevó 10 materias” así que quiero que se
decida si va a trabajar o a estudiar. Pero no le pague. La señora me dijo que no dijera nada, pero que me iba a pagar. Y bueno me pasé el verano. Limpiaba, llevaba cajones, armaba estibas de cajones, cambiaba las botellas. Y ahí cobré. Y lo ahorré.
—¿Una comida?
—Los tallarines de mi mamá
con estofado. Caseros y con mucho huevo.
—¿Una bebida?
—La Coca Cola en envase de vidrio.
—¿Qué música escuchás?
—Rock, reggae, trovadores y pop. En ese orden.
—¿Una banda o solista ?
—Sumo, Luca se llama mi hijo.
—¿Una película o serie?
—Invictus y Californications.
—¿Un viaje?
—Mi primer viaje a Europa en 2014.
—¿Una ciudad?
—San Sebastián, España.
—¿Un barrio o lugar de Paraná?
—El barrio Santa Lucía.
—¿Qué lugar te gustaría conocer?
—Las Islas de Phi Phi. Las guardé en mi último viaje a Tailandia para ir a conocerlas con mi señora y mi hijo. A todos los lugares que fui, siempre dejé algo para conocer cuando vayan ellos. No fui a la Muralla y fui a la ciudad perdida; no fui a Phi Phi fui a Phuket y Bangkok. Fui a Chengdú y no fui a ver los pandas. El día que vaya quiero tener algo nuevo para conocer.
—¿Un hombre?
—Mi viejo, Omar.
—¿Una mujer?
—Mi madre, Palmira.
—¿Cuál es el contacto más
groso que tenés en el celular?
—Mi señora Sandra León.
—LA SELFIE RECARGADA
—¿A quién te gustaría meterle un caño y decirle oleeee?
—A Macri.
—¿Qué te hubiese gustado ser
de no haber sido lo que sos?
—Me hubiese gustado ser quien soy, pero quizá desarrollando otras cosas porque me gusta mucho la psicología, la filosofía y me gusta cocinar y la música. Si puedo flashear: músico o artista.
—¿A quién le sacás la roja?
—A los que usan la guerra
como negocio.
—¿Qué camiseta nunca te pondrías?
—La de Racing.
REDES
—¿Cuántos grupos de whatsapp tenés y cuál es el mejor?
—Tengo como cuatro o cinco de whatsapp y 10 de Wechat (en China) y los más importantes son el de mis amigos de acá que se llama Chinatown; tengo un grupo con un profe, una traductora y un español que se llama Javi que es muy bueno y el grupo Latinos en Yinchuan.
—¿Quién te gustaría que te
siga en instagram?
—Diego.
—¿Con quién te gustaría tener
una selfie y en dónde?
—Con la Bruja Verón en China. Es una proyección que tengo. Se que si estoy en China y va Verón las cosas están bien. Cuando fue no lo vi, pero hablé por teléfono. Dio algunas conferencias con el chino con el que yo trabajo.