El sueño del pibe nacido en Feliciano

Andrés Martino/ Ovación
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Se llama Gonzalo López, es de Feliciano, tiene 11 años y está cumpliendo con el sueño del pibe. Es que este atacante goleador está realizando una adaptación, ni más ni menos, que en River Plate, club donde en un futuro no tan lejano se mudará para instalarse definitivamente en la pensión de la entidad Millonaria, uno de los colosos del fútbol nacional.

Su padre, orgulloso de su hijo como corresponde, tomó contacto con Ovación y habló de cómo se fueron dando los pasos para este soñado arribo.
 

—¿Dónde empezó a jugar al fútbol Gonzalo en Feliciano?
—Él empezó a jugar en una escuelita de fútbol que tenemos acá que se llama Los Teros. El año pasado fuimos a Concordia a jugar un amistoso a Concordia y ahí lo vio la gente de la Filial de River que funciona ahí más algunos coordinadores que habían llegado desde Buenos Aires.
 

—¿De qué juega?
—Gonzalo juega de delantero, de siete o de nueve.
 

—¿Goleador?
—Sí, bastante. Le gusta el arco.
 

—¿Y cómo se da el primer paso para llegar a River?
—El siguió bajo la tutela de la filial de Concordia que la maneja Camilo Compagnie. El año pasado lo llevamos todo el tiempo a Concordia y de ahí se fue a Chile con la escuelita y principios de este año lo vio el entrenador general de las divisiones inferiores de River que es Eduardo Abrahamian. Ahora está yendo, cada dos meses mas o menos a Buenos Aires a entrenar con los chicos.
 

—A modo de adaptación.
—Claro. Hace más de una semana estuvo en un torneo grande como es el de Sunchales, el que organiza Unión.
 

—Me imagino que ustedes en la familia, como el propio Gonzalo, están muy contentos por este presente.
—Sí, pasa que por ahí la madre se me bajonea un poco porque en breve Gonzalo se tendrá que presentar en la pensión de River. Esto será el año que viene.
 

—¿La familia de qué cuadro es?
—Nosotros somos gallinas (risas).
 

—Les viene bárbaro entonces.
—Sí, todo esto es una locura.
 

—¿Qué mensaje le bajan ustedes como padres a Gonzalo?
—Nosotros dejamos que él decida. Lo que él quiera está bien. Es muy fanático, está desesperado y cada vez que se va a River se enloquece.
 

—Es el sueño del pibe.
—Sí, totalmente, es el sueño del pibe. La verdad que no sé qué sentiríamos al verlo debutar, pero sería tan grande el orgullo que... ay mi Dios (se emocionó). Ahora, a fin de año se va de nuevo a Chile en una gira de 20 días.
 

—A extrañarlo de nuevo.
—Sí, seguramente, pero esto nos sirve a nosotros para ir acostumbrándonos. Él ya tiene todo definido, somos nosotros. Él, cuando se va por ahí, ni se acuerda del padre. Él está mentalizado desde el primer momento. Siempre se quiso ir a jugar a River.

Elda Aguire (mamá):
“La verdad que yo soy la que más sufre cuando se va, pero trato de no demostrárselo porque es el sueño que tiene desde que era chiquito. Siempre miró todos los partidos, no miraba los dibujitos. Partido que había, lo miraba y siempre decía que en algún momento iba a estar ahí. Yo trato de no demostrarle lo que siento, pero cuando no está, me muero. Me pone contenta cuando lo llamo y hablamos porque lo veo con muchas ganas. Eso me tranquiliza porque está feliz y no extraña para nada. Me pone feliz a mí porque está realizando lo que siempre soñó y de a poco lo va logrando. La verdad que me lo imagino en la Primera de River porque el esfuerzo que hace es muy grande. En la escuela es abanderado y a eso lo hace porque del club se lo piden”.

A Chile
Gonzalo López ya viajó a Chile donde estuvo por espacio de 20 días con el elenco de Núñez y el año que viene, irá de vuelta a jugar a ese país por segunda vez. Luego deberá instalarse en la pensión en Buenos Aires en busca de su sueño: jugar en Primera.