El resultado de los peritajes balísticos del supuesto ataque al titular de la delegación Santa Fe de la Policía Federal, Mariano Valdés, descartarían de que se haya tratado de un "atentado mafioso", tal como se supuso en un primer momento, a partir del relato del jefe policial, quien recibió dos disparos de arma de fuego, uno en la ingle y otro en el brazo en la autopista Rosario-Buenos Aires.
La evidencia que pone en tela de juicio el relato del jefe baleado
La investigación que lleva adelante el Ministerio Público de la Acusación (MPA) puso en duda la versión de Valdés, quien aseguró que había sido atacado a balazos por encapuchados que se desplazaban en una camioneta negra. Según el relato del policía, en el momento del atentado volvía de Buenos Aires y estaba acompañado de la suboficial Roxana González. La pesquisa puso en duda su versión.
Los indicios recabados por la Fiscalía echarían por tierra la versión del ataque mafioso que fue abonada por la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien ayer calificó de "mentiroso" a Valdés y anticipó su remoción del cargo. Ahora las pesquisas se orientan hacia una posible relación extramatrionial entre el jefe policial y la suboficial que estaba con él en el Ford Focus cuando fue baleado.
A continuación se detallan las incongruencias detectadas en el relato de Valdés:
1- Las heridas. El análisis de la herida de bala en la ingle que sufrió Valdés reveló que disparada a una corta distancia, no mayor a 30 centímetros, y que se produjo dentro del auto.
2- La yerba El jefe policial aseguró que fue atacado cuando había parado a vaciar el mate en la banquina. Los restos de la yerba no fueron hallados en el lugar.
3- Las vainas. En la primera búsqueda que hizo la Policía de Investigaciones (PDI) no se hallaron las vainas de los supuestos disparos hechos por los encapuchados.
4- El lugar. En un segundo patrullaje realizado días después por Gendarmería se encontraron los casquillos a 5 kilómetros del lugar donde Valdés dijo que fue atacado.
5- Los disparos. Dos de los dos balazos que atravesaron el apoyacabezas del conductor. Si Valdés estaba dentro del auto, como declaró, los disparos lo hubieran herido en la cabeza.
6- La camioneta. Valdés y González aseguraron que les dispararon desde una camioneta negra. No se hallaron registros de video del paso del vehículo en la autopista.
7- El video. Un video registrado por las cámaras de seguridad de la estación de servicio a donde fueron a pedir auxilio evidencia contradicciones entre los hechos y las realidad.
8- La acompañante. La suboficial González fue citada a declarar pero se excusó esgrimiendo un certificado psiquiátrico que le aconsejaba no hacerlo.
Frente a esta evidencia, Bullrich ayer adelantó en Twitter que iba a separar del cargo a Valdés: "¡La verdad no se tapa! Este mentiroso disfrazado de policía será removido inmediatamente de la institución. La pericia confirmó que el comisario Valdés de la PFA no sufrió un intento de robo sino que el disparo fue desde adentro de su vehículo".
Fuente: La Capital