Ruralistas aguardan la definición judicial solicitada por la familia Etchevehere, desde la cabecera entrerriana del Túnel subfluvial.
Familia Etchevehere: ruralistas siguen definición judicial en el Túnel
Mientras la Justicia define si ejerce el desalojo -o no- de Dolores Etchevehere de la estancia Casa Nueva, en Santa Elena, y los hermanos Etchevehere siguen las apelaciones por sus teléfonos móviles apostados en el ingreso al campo, un grupo de ruralistas se concentraron en cercanías del túnel subfluvial para mostrar su apoyo a los hermanos Etchevehere. Fueron convocados a un estado de alerta y movilización por las entidades que conforman la Mesa de Enlace.
Se trata de un grupo reducido de productores que se expresan con banderas argentinas y entrerrianas sin cortar la ruta. Personal de Gendarmería se encuentra en el lugar para garantizar la seguridad y la circulación vehicular.
En diálogo con UNO Víctor Beltramino, vicepresidente de la filial de la Federación Agraria de Cerrito expresó: "Lo que está pasando en el campo de los Etchevehere en Santa Elena cayó muy mal en toda la comunidad de productores. Más allá de los nombres de estas familias que son reconocidas a nivel nacional, lo que nos motiva a estar en la ruta es el miedo y la preocupación por el futuro y la protección de la propiedad privada. Yo tengo 300 hectáreas que están detrás de mi pueblo y si sigue este festival de tierras, en cualquier momento me encuentro con que me alambraron dos o más hectáreas y se instalaron", explicó el entrevistado.
También dejó en claro que el éxodo de las familias rurales a la ciudad tiene causas concretas y es lo que genera posibilidades de que los terrenos sean intrusados: "Por falta de caminos, de acceso a la educación, salud y hasta a Internet muchas veces los pobladores terminan por abandonar sus casas y se van. Esas edificaciones son taperas y quedan hectáreas y hectáreas en soledad y desprotección. Quedamos muy expuestos y lo que está haciendo el grupo de militantes del Proyecto Artigas en la estancia de Santa Elena lamentablemente deja un precedente. Por eso el campo se mueve, por miedo", sentenció.