El Ministerio de Defensa desclasificó el documento que reconoce un Ovni en Bariloche

La Comisión de Estudio del Fenómeno Ovni de la República Argentina realizó la solicitud de acceso a la información pública, por gestión electrónica y "después de tantos años lo desclasificaron", respondió este viernes a UNO Andrea Pérez Simondini, la hija de Silvia Pérez Simondini que a los 80 años continúa al frente del Museo del Ovni de Victoria.

"Estamos muy contentos porque es el primer caso oficial, ojalá que ahora se vengan más", reiteró la investigadora reconocida a nivel internacional.

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Hoy se conoció que el Ministerio de Defensa de la Nación desclasificó por primera vez en la historia Argentina documentos relacionados al avistaje de un objeto volador no identificado (OVNI) en el país.

Según publica Clarín, se trata del denominado “caso Bariloche”, registrado el 31 de julio de 1995, cuando un avión de Aerolíneas Argentinas comandado por el piloto Jorge Polanco que aterrizaba en esa ciudad fue interceptado por un objeto que lo obligó a realizar una maniobra de escape de alto riesgo.

La Comisión de Estudios del Fenómeno Ovni en la República Argentina (CEFORA) dio a conocer los archivos. Los había solicitado en base a la Ley 27275, que faculta a cualquier ciudadano a pedir información de su interés al organismo del Estado que lo desee.

“Una cantidad de ciudadanos asesorados por CEFORA realizaron solicitudes, generando por respuesta la copia de la desgrabación de la Torre de Control, las declaraciones del día de los hechos de los testigos principales y las actuaciones con los mails correspondientes de investigadores civiles preguntando por el caso”, precisó la organización.

Los archivos desclasificados incluyen intercambios de cartas, declaraciones y hasta la desgrabación de los diálogos de la torre de control con los pilotos el día de los hechos.

"Tenemos un objeto a la derecha formándonos. Tiene dos luces intermitentes brillantes. No sé... creemos que es un plato volador”, asegura el piloto en uno de los registros. Luego la grabación se interrumpe por cuatro minutos, de los cuales no hay registro.

Los documentos incluyen también las declaraciones de Polanco los días posteriores: “En descenso, observamos en trayectoria opuesta el acercamiento de luces con fuerte intensidad. A requerimiento nuestro se notifica y la Torre confirma que no se trata de ninguna aeronave identificada”, relata.

“Al efectuar el viraje de procedimiento, dicho objeto se aproxima desde el sur, quedando a nuestra derecha y acercándose en forma continua”, agrega.

Cómo era

La aeronave tenía “luces verdes en los extremos y una fuerte luz naranja en el centro”. “Con el objeto a nuestro lado, se produce el corte de todas las radios de ayuda del aeropuerto”, detalla el piloto.

Finalmente, señala que el OVNI “se alejó bruscamente en dirección al sudeste a velocidad imposible de terminar” y remarca que un “avión de Gendarmería confirma haber avistado el objeto”.

Piloto y testigo

El 31 de julio de 1995 el piloto Jorge Polanco comandaba un Boeing 727 de Aerolíneas y, según su relato, cuando se disponía a aterrizar, “una luz, primero tenue, luego intensa y brillante, se interpuso entre la nave y la pista”.

Dio aviso a la Torre del Control, desde donde le confirmaron que no se trataba de ninguna aeronave identificada.

Luz habría acompañado al Boeing con 102 pasajeros y tres tripulantes durante 17 minutos, según el relato.

En ese apso, entre las 20.17 y las 20.31, el suministro eléctrico se interrumpió en toda la ciudad, incluyendo el aeropuerto.

"Cuando hice la maniobra de escape, el OVNI ascendió a una velocidad increíble y se quedó suspendido en los 3.000 metros, esperando a que llegáramos. No se movía ni se trasladaba según las leyes físicas conocidas. Al vernos descender, desapareció a toda velocidad”, precisó Polanco.

El episodio también fue presenciado por los Comandantes Juan Domingo Gaitan y Rubén Cipuzak, quienes iban a bordo de un avión de Gendarmería Nacional, que realizaba un vuelo sanitario.

“El evento fue registrado por la Torre de Control donde se encontraba el Jefe del Aeropuerto el Suboficial Daniel García, generando comunicaciones entre controladores aéreos y pilotos, siendo observado además, por múltiples testigos y personal del servicio Meteorológico y de pista”, precisaron desde la CEFORA.

Con información de Cefora, La Voz y Clarín.