El presidente electo Alberto Fernández decidió suspender el viaje que iba a realizar a varios países europeos pocos días antes de asumir el cargo. La decisión se conoció ayer y motivó diferentes especulaciones periodísticas y políticas. El exjefe de Gabinete tenía previsto reunirse con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y con el primer ministro de Italia, Giuseppe Conte. Incluso se especulaba con que concurriera a una audiencia privada con el papa Francisco en el Vaticano.
Alberto suspendió la gira europea para definir las primeras medidas
Sin embargo, fuentes cercanas al presidente electo confirmaron que el viaje se suspendió porque estos días antes de asumir el Poder Ejecutivo los dedicará a terminar de definir su Gabinete y a darles los puntos finales a las primeras medidas que pondrá en marcha desde el 10 de diciembre, de acuerdo a lo que publicaban ayer por la tarde diferentes medios de comunicación porteños.
Igualmente se indicó como otro motivo de la suspensión, que no pudieron coordinar una fecha con los representantes del gobierno de Francia para el encuentro con Macron.
Tanto el francés Macron como el italiano Conte representan a países de peso en el directorio del Fondo Monetario Internacional, donde Fernández requeriría de su apoyo en el contexto de la renegociación de la deuda que la Argentina tiene con el organismo internacional, que aumentó exponencialmente durante la actual gestión de Mauricio Macri.
Otra de las especulaciones periodísticas hicieron referencia al hecho de que la suspensión de la gira se conoció pocas horas después de que Fernández anunciara que impulsaría un nuevo proyecto para despenalizar el aborto, lo que habría dificultado la posibilidad de entrevistarse con el Papa. Igualmente ese encuentro era solo una posibilidad, y no tenía la certeza de que si se le atribuía al encuentro con los mandatarios francés e italiano.
De todas formas, desde las oficinas del Frente de Todos en Puerto Madero aclararon que la suspensión del viaje no alteró la relación de Fernández con Macron, que fue uno de los primeros presidentes europeos en llamarlo para felicitarlo por el triunfo en las elecciones, consignó Infobae.
Es que Fernández sabe que Macron y Francia tienen voz y voto en el directorio del FMI, habitualmente dominado por los Estados Unidos, pero donde el resto de las potencias como el país galo, Italia, Gran Bretaña y Japón pueden balancear el equilibrio de poder.
La relación entre Macron y Fernández había comenzado con el pie derecho cuando el francés llamó al argentino para felicitarlo por su triunfo en las elecciones del 27 de octubre. Esa comunicación ocurrió el 9 de noviembre, poco antes de que el líder del Frente de Todos tuviera que inaugurar la cumbre del Grupo de Puebla en Buenos Aires.
De hecho, debido a la charla con el francés, que se extendió por una hora, Fernández llegó tarde al evento en el hotel Emperador: “Me demoré en llegar porque tuve casi una hora de charla con el presidente de Francia; una charla espléndida, en la que hablamos de Lula, de Bolivia, de Chile, de todos los problemas de la región”