La asociación de empresarios envió un archivo con 30 restaurantes asociados de los cuales solo seis estarán abiertos en la última noche del 2014. La mitad de los que trabajarán son los salones de los hoteles. Los dos más grandes de la ciudad y el que se encuentra sobre bulevar Racedo en donde vuelven a ofrecer un menú vegetariano. Los gastronómicos reconocieron que en la capital provincial se fue perdiendo la costumbre de recibir el año cenando en un restaurante a diferencia de lo que ocurre en las ciudades más importantes del país.
El momento de planificar la cena de Fin de Año es ahora
Las tarjetas están cerca de 500 pesos por persona y aseguran un menú con una recepción, entrada, plato principal y postres.
Opciones
Algunos restaurantes eligieron abrir sus puertas hasta el 31 al mediodía o tener abierta la cocina pero solo para realizar ventas por pedido.
Muchos anunciaron que cerrarían sus puertas tanto el 31 como el primer día del año por lo que la ciudad cambiará su fisonomía. Tanto que algunos turistas que paseaban ayer por las calles del centro capitalino se asombraron con la cantidad de locales gastronómicas que tenían sus puertas cerradas.
Hace una semana, los referentes gremiales de los gastronómicos, explicaron a este diario que la decisión de cerrar la tomaban como una reivindicación. “Son días muy especiales que los trabajadores prefieren quedarse en casa con la familia”, había resaltado Hugo Permayú, el secretario General de la Unión de Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Uthgra).
Buen año
Los empresarios reconocieron que despedirán el año muy conformes por el movimiento turístico que se registró en la ciudad durante todo el año.
El deporte tuvo mucho que ver con la llega de turismo internacional y lo más importante es que los visitantes estuvieron más de tres noches aumentando el promedio habitual que es de dos.
La frutilla del postre fue la Cumbre del Mercosur que sirvió para colmar la plaza hotelera. Los participantes de la Cumbre Social llegaron con varios días de anticipación y se fueron retirando en tandas separadas.
Ahora se preparan para esta última semana del año que, en Paraná, siempre tiene una alta demanda porque muchas familias que viven afuera de la provincia deciden pasar algunos días en los hoteles, sobre todo, del parque Urquiza.
Luego viene la temporada de Verano que es “bastante floja” y solo se potencia en los recambios de quincena. En el sector reconocen que la ciudad “no es la opción final”. Muchos viajeros se quedan una noche para luego seguir hacia Gualeguaychú, Colón, la República Oriental del Uruguay o Brasil.
Expectantes
Los hoteleros ofrecen la opción de la cena de fin de año y además realizan algunas bonificaciones a sus huéspedes. Esperan ansiosos la respuesta de los turistas que después de muchos años tendrán playas en la ciudad. Los empresarios explican que es una de las recriminaciones que hacen los visitantes. Por que el río está alto o porque que bajó, siempre faltan playas con infraestructura. El 2015 aparecerá con un panorama diferente.