Este año son numerosas las escuelas secundarias de Paraná que no realizarán una fiesta de recepción. Se limitarán al acto de colación, y eventualmente harán un brindis en este contexto. En otros casos, serán los propios padres los que organicen la celebración y se ocuparán del menú, para abaratar costos.
El ajuste llegó a las fiestas de recepción de la Secundaria y tienden a extinguirse
Para celebrar que egresaron, alumnos y sus familias deben pensar en gastar unos 750 pesos por persona, sin contar el salón y el vestuario
28 de noviembre 2017 · 06:00hs
Es que las subas de precios de alimentos, bebidas y servicios que se vienen dando a lo largo del año afectó a uno de los festejos clásicos para cerrar una etapa de la vida. Incluso hay quienes afirman que esta tendencia comenzó ya en 2016 y que a los servicios cada vez les cuesta más ofrecer un presupuesto que sea aceptado por lo padres, que pretenden calidad y bajos precios.
"Las recepciones hace tiempo que vienen decayendo. Me han consultado varias escuelas, pero luego decidieron no hacer fiesta o lo definen tarde porque piden varios presupuestos y yo ya tengo ocupada la fecha con otro evento", contó a UNO Darío Andino, quien tiene una amplia experiencia en el rubro.
A su vez, observó: "Lo que veo en la mayoría de las escuelas, de cualquier nivel socioeconómico, es que los padres se interesan cada vez menos por este tema, no apoyan a los chicos, que suelen estar solos en esto. En los casos en los que sí se involucran averiguan un año antes, y ya empiezan a juntar el dinero, pero son los menos".
"También pasa a veces que entre todos los alumnos no comparten una misma idea, y como no terminan de ponerse de acuerdo empiezan los conflictos y por eso no hacen la recepción", agregó.
En su caso, ofrece un servicio que no incluye salón y consiste en una recepción; primer plato, que puede ser el clásico matambre con ensalada rusa; luego pollo deshuesado o vacío relleno, con papas noisettes; postre helado; bebidas de primera marca en vinos, cervezas, gaseosas, agua mineral y saborizada; menú de trasnoche; mesa dulce y torta ceremonial, acompañando con un brindis con sidra para los presentes. "En ese paquete van incluidas mesas y sillas si el salón no tiene, manteles y cubresillas, vajilla y elementos de cocina, y el personal de cocina y los mozos. Y les ofrecemos también a los clientes una ambientación con living para 100 personas, el disc-jockey y la decoradora que ambienta el salón", dijo, y señaló: "Al precio para este servicio lo estoy aguantando este año a 800 pesos para mayores de 13 años en adelante, y 350 a menores a partir de los 3 años".
En este marco, explicó: "Los precios están bastante cambiantes, porque con el tema de la inflación que se viene registrando a lo largo de 2017 han aumentado bastante la materia prima y las bebidas. Aunque en la mayoría de las veces tratamos de mantenerlo, por ahí debemos modificar el precio que dimos en un inicio".
Por otra parte, manifestó que al pedir presupuesto, los padres suelen pedir rebajas, y explicó: "En mi caso quiero mantener un nivel y un prestigio, por eso no puedo abaratar la calidad del menú. La opción es ofrecerles segundas marcas en bebidas. O hay quienes consultan por un buffet o una mesa americana, con más bebidas, que es una alternativa más económica, pero para recepciones la gente presta atención al menú porque va mucha gente mayor y no es lo que más eligen. En lo que sí hacen hincapié es en que haya barra de tragos".
Andino sostuvo que hasta 2015 la gente buscaba un presupuesto con tiempo y se reunían más los padres con los alumnos, pero desde el año pasado cambió. "Se les junta con el viaje de egresados y otros gastos más, y se les hace cuesta arriba a los padres. No sé adónde va a ir a parar todo esto, porque lo mismo está pasando con los cumpleaños de 15; por suerte no es así en los casamientos".
En coincidencia, Mauricio Villagra, quien también tiene una extensa trayectoria en el rubro, aseguró que este año se advirtió mucho la merma. "A diferencia de otros años se redujo notoriamente. Hay cada vez menos recepciones y esto se está dando desde el año pasado, pero ahora se notó más, y somos muchos los servicios, por eso cada vez se trabaja menos. Lamentablemente este año son solo dos las que tenemos", dijo.
Además, comentó: "El tema de los costos hace que hoy en día muchos padres prefieran organizarla ellos, buscan un club con salón y se ocupan de la comida".
El servicio que él ofrece cuesta unos 750 pesos promedio. "La gente siempre pide lo más barato. Por un costo aproximado de 750 pesos ofrecemos un menú básico pero bien completo, que incluye recepción, entrada y plato principal, postre, bebida, barra de tragos, menú de trasnoche, y también la vajilla, mesas sillas y cubresillas, personal de cocina y mozos. Lo que no contempla el servicio es el disc-jockey, ni decorador ni fotógrafo".
Villagra señaló que por las variaciones de precios, al momento de dar un presupuesto se avisa que puede actualizarse 30 días antes. "Se pide una entrega y después van pagando mensualmente, para que no se haga tan pesado al llegar la fecha de la fiesta. Si no hay mucha diferencia de precios se mantiene el valor que se dio, para no correr al cliente, pero si hay mucho incremento en las cosas, lamentablemente no queda otra que modificarlo, porque hoy en día aumenta todo".
Reticencia
Numerosos referentes de los servicios locales admiten que son reticentes a trabajar con recepciones. "Los chicos vienen muy conflictivos y suele haber disturbios en este tipo de fiestas; se rompe mucha vajilla, entre otras cuestiones. Por eso hay servicios gastronómicos y salones de eventos que no hacen recepciones", dijo al respecto Andino.
Por su parte, Villagra señaló: "También pasa que los padres son problemáticos, porque no entienden que las cosas aumentan. Ven el trabajo de esa noche, pero no el que uno viene haciendo 30 días antes, en que se van consiguiendo las cosas, se va comprando la bebida a medida que hay mejores precios, para mantenerle el precio a ellos".