Crece la economía social con los emprendedores en la Feria

En la Feria de Salta y Nogoyá hay 42 stands de emprendedores que los sábados y domingos ofrecen sus elaboraciones. La economía social en Paraná tiene en diferentes productos gastronómicos y textiles, sus principales ramas de trabajo. Existen hoy una serie de líneas de microcréditos destinados a poder favorecer la realización de estas actividades económicas. También se asesora para acceder a nuevos programas a aquellos que desde hace un tiempo producen y ya están en funcionamiento.

 

Desde la Secretaría de producción, innovación y empleo de la municipalidad, afirman que una de las formas de comprobar el crecimiento que se ha tenido en lo que respecta a la economía social, es a través de la feria. “Hoy hay más herramientas disponibles”, dijo el secretario Pablo Daniel Chapado y agregó: “También hay un impulso desde la gestión para que esta economía social se ponga en blanco, produzca y pueda ser proveedora. La intención es que aquello que se haga pase de ser una especie de hobby, a un trabajo”.

Dentro de las próximas propuestas que se tienen, se busca que todos los emprendedores de la ciudad puedan acceder al Monotributo social. “La intención es que sea la Municipalidad la que pueda lograr tramitarlos”, destacó el secretario.

 

Los domingos por la mañana, la feria se llena. Entre los pasillos hay mesas destinadas a nuevos puesteros. Josué, que vive cerca de la Escuela Hogar, desde mayo del año pasado hace y vende junto a su familia, ravioles, canelones, ñoquis y fideos caseros.

 

También a hay mesas de dulces y mermeladas, tortas y pasteles e incluso de licores artesanales. Entre los puestos, también se destacan los de calzado y algunos que ya son históricos de embutidos, panadería y hasta artículos de decoración. “Para tener una mesa pagamos 20 pesos por día”, dijo Vilma que es docente y los domingos apronta dulces en almíbar, mermeladas, miel y nueces. Hace dos años que ofrece sus productos y si bien asegura que hoy no puede vivir de la feria, “sí es una ayuda, además hay un buen clima de amistad entre los meseros y los clientes”.

Proyecto Joven
Dentro de las líneas de la economía social, el proyecto joven, según la explicación brindada por Pablo Chapado, es uno de los que más se ha desarrollado en el último tiempo. “Es un plan que permite terminar la Primaria o la Secundaria, un curso de formación profesional y de cómo se desarrolla un microemprendimiento en lo que ellos se capacitaron y cobran un subsidio”.

Asimismo, para aquellos que son mayores de 24 años y están desocupados “y no tengan nada”, la alternativa es la de capacitarse en un oficio y realizar el curso de microemprendimiento. “La diferencia es que con el plan joven pueden estar hasta dos años y cobrar hasta 400 pesos mientras haga una contraprestación”, indicó Chapado.

A su vez, señaló que aquellos que ya desarrollan un microemprendimiento y tienen la inquietud de poder contar con un crédito para mejorarlo o ampliarlo, se destinan, a través de la secretaría municipal al Banco Popular de la Buena Fe.