Choferes de Paraná adhieren al estado de alerta declarado por la Unión Tranviaria Automotor (UTA) a nivel nacional ante la negativa de las empresas de abonar los salarios del mes de abril.
Choferes de Paraná adhieren al estado de alerta declarado por UTA a nivel nacional
UTA Paraná adhirió a la medida, según adelantó a APF el secretario gremial de la filial, Sergio Groh.
El lunes pasado los choferes de la capital entrerriana levantaron un paro que mantenían desde el 25 de abril, luego de que Buses Paraná les terminara de pagar los sueldos de marzo
“Después de más de veinte días de negociaciones y tres audiencias en el ámbito del Ministerio de Trabajo de la Nación, y pese a las reiteradas advertencias de la inminente problemática salarial, se nos ha informado la negativa empresaria a hacer frente a los salarios del pasado mes de abril”, se lee en un documento emitido a nivel nacional por la Unión Tranviaria Automotor (UTA), que lleva las firmas del secretario general, Roberto Fernández, y el secretario del Interior, Jorge Kiener, del consejo directivo nacional.
Señalaron que “tal posicionamiento de nuestros empleadores, a más de ser ilegítimo, ofende, atenta y agrava la situación existente, de trabajadores que han prestado tareas durante todo el periodo de aislamiento social preventivo y obligatorio”.
“Repudiamos y rechazamos fervientemente la postura de las empresas y de las autoridades de transporte nacional y provinciales, quienes por su inacción permiten que se vulneren seriamente los derechos alimentarios básicos de nuestros compañeros”, subrayaron además.
Luego lamentaron: “Se ha ignorado el compromiso puesto al servicio del transporte, de quienes han asumido sus tareas, con la responsabilidad que ameritan las actuales circunstancias, atendiendo a la problemática social con sensibilidad, razonabilidad, y responsabilidad. Duele que a otras actividades se las reconozca social y económicamente, y muy por el contrario a nosotros se nos informe que no se nos pagarán los salarios por los que trabajamos”. Y expresaron la “inmensa preocupación ante la falta de pago de salarios, que es nada menos que el sustento de 35.000 familias del transporte de pasajeros del interior del país”.
Por último apuntaron: “Dejamos en claro que ante cualquier ilegítimo proceder que signifique conculcar los derechos de nuestros compañeros, ello merecerá la respuesta inmediata por esta organización gremial que representamos”.
La medida se decidió este miércoles, luego de que fracasara una negociación para el pago de los haberes de abril. El estado de alerta se mantendrá al menos hasta las 11:30 de este jueves, cuando se realizará una nueva audiencia entre las partes en el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad de la Nación.