El comienzo de año de Boca no fue el esperado por los hinchas “Xeneizes”. El regreso de Carlos Bianchi al banco de la “Bombonera” generó muchas expectativas para un entrenador que no dirigía tras ocho años.
Boca jugó mal y perdió claramente con All Boys en Floresta
La derrota ante Deportes Tolima en su debut en la Copa Libertadores, la floja producción ante Quilmes y el empate con Tigre sin goles, obligaban al “Virrey” a conseguir los tres puntos y demostrar un juego convincente.
El espectáculo en Floresta comenzó enérgico. Los equipos se insinuaban pero no lograban lastimarse. La movilidad del “Burrito” Martínez, la fuerza de Santiago Silva y la precisión de de Walter Erviti eran las herramientas más destacadas de Boca. En cambio, los disparos de media y larga distancia de Oscar Ahumada y el vértigo de Iván Borghello constituían las armas más fuertes de All Boys.
Las emociones se vivieron en el complemento. Ninguno era favorito a romper el marcador, sin embargo, el que pegó primero fue el conjunto de Floresta: tras un pelotazo punzante, que complicó a los centrales “xeneizes”, el goleador del torneo, Oscar Ahumada, anotó el 1 a 0 que generó un “silencio atroz” en las tribunas de “la 12”.
Pero la sorpresa no iba a acabar con el tanto del ex River, ya que en una jugada detenida, donde los defensores de Boca se disfrazaron de luchadores de catch, convirtieron tres penales en la misma jugada y Diego Ceballos no tuvo otra alternativa que sancionar la pena máxima.
Ángel Vildozo, desde los 12 pasos, dejó sin chances a Ustari y marcó el 2 a 0 definitivo, para que el conjunto de Pepe Romero se ilusione con ganarle a un grande en su cancha. La historia de David y Goliat, se volvía a vivir en Floresta.
Con el segundo golpe de All Boys, Carlos Bianchi se resignó, ya que las variantes que probó durante los 90 minutos no tuvieron un resultado positivo. La imagen del “Virrey” desplomado en su trono demostraba que José “Pepe” Romero era el amo y señor del partido.
En la próxima fecha Boca recibirá a Unión en su cancha, una oportunidad extraordinaria para poder reivindicarse ante el rival más débil del torneo. Sin descuidar el compromiso por la Copa Libertadores, del próximo miércoles, en Guayaquil ante el Barcelona.