El juez Raúl Dalto consideró que "es un peligro" que el odontólogo Ricardo Barreda continúe viviendo con su pareja Berta y ordenó que sea alojado en el penal de Gorina.
Barreda volverá a la cárcel
La citación, según fuentes judiciales, respondía a que, en informes realizados por el gabinete de psicólogos que asiste a Barreda, había surgido que entre el odontólogo y su pareja existen problemas conyugales, por lo que el juez resolvió tomar contacto personalmente con ellos para interiorizarse sobre la situación.
Barreda se encuentra excarcelado desde marzo de 2011, luego de ser condenado en 1995 a prisión perpetua por matar a escopetazos a su esposa Gladys McDonald (57), a su suegra, Elena Arreche (86), y a sus dos hijas Cecilia (26) y Adriana (24), en noviembre de 1992.
Problemas de pareja
Barreda habría manifestado que la mujer tiene problemas de salud, neurológicos, que habrían afectado sensiblemente la vida en pareja y también habría planteado los problemas económicos que padece, ya que cobra una jubilación mínima de 2.500 pesos, por lo que decidió reclamar por sus bienes, que están en proceso judicial.
El 28 de noviembre la Justicia lo declaró "indigno" en la sucesión de los bienes familiares a Barreda, lo que claramente lo perjudicó. La sentencia fue dictada por el juzgado civil y comercial de La Plata 17, que explicó que lo excluía de la herencia por "una causal objetiva de indignidad", prevista en el artículo 3291 del Código Civil.
El patrimonio en litigio consiste en una casona de la ciudad de La Plata, ubicada en la calle 48, entre 11 y 12, donde el odontólogo cometió el cuádruple crimen. Barreda tampoco recibirá dos automóviles (un Ford Falcon verde y un DKW) , una moto Siambretta, una casa de veraneo en Mar del Plata, que está intrusada, y un terreno en la provincia de Buenos Aires.