El eslogan que desde hace años acompaña al Carnaval de Concordia está asociado a la "guerra de las pasiones". Así se lo puede vivir cuando llegan las noches sabatinas de verano y el corsódromo Atanasio Bonfiglio reúne a las cuatro comparsas de la ciudad.
Agustina Barrio: Pasional protagonista del Carnaval de Concordia
Agustina Barrio está viviendo un momento de suma algarabía porque este año tiene el orgullo de recorrer la manga como la Reina del Carnaval. Pese a que sus colores están ligados al Tricolor de comparsa Ráfaga, es consciente de que representa a un evento que se transformó en un fenómeno social y sábado tras sábado convoca a una multitud.
La joven estudiante de Ciencias Políticas y muy arraigada a su familia repasó con UNO lo que fueron estas primeras tres noches carnavaleras y las próximas tres que aún restan por vivir.
—¿Qué significa el carnaval para vos?
—Es mi cable a tierra. Entré en el carnaval estando mal personalmente y fue lo que me ayudó a salir y a volver a la alegría, a disfrutar. Además, tuve el agrado de que mi familia se pusiera a mi disposición y ahora somos una familia carnavalera desde hace siete años. Los cinco vivimos para el carnaval
—¿Arrancaste con el carnaval de los Pequeños Duendes?
—No, comencé de grande, pero en los Pequeños Duendes estoy de jurado y desde chiquitos ves como se transmite la pasión. Por algo somos el carnaval más pasional del país, porque se nace desde la cuna. Se transmite la pasión que tienen los peques y después se traslada al carnaval de los grandes.
—¿Y el carnaval tiene eso de aferrarse mucho al barrio de uno?
—Se defienden los colores, la bandera de uno, y a la competencia la defendés con capa y espada.
—¿A qué le atribuís el crecimiento que ha tenido el carnaval como espectáculo en sí?
—Venimos en función de trabajar para que el carnaval crezca. Este año gracias al Ente de Carnaval y al respaldo del intendente Enrique Cresto se hizo un trabajo de promoción muy arduo, que se vio reflejado en lo que fue la primera noche de carnaval, con un lleno del Atanasio Bonfiglio.
—El evento que arman sábado tras sábado no es para envidiarle a las otras competencias.
—Somos únicos, porque en ningún lugar del país se ve la algarabía de las tribunas. Las hinchadas cómo alientan a sus comparsas y a las que compiten. Más allá de que esté desfilando otra bandera en la manga, se canta igual el samba enredo de otra comparsa. Eso nos caracteriza, por más que haya competencia, somos unidos.
—¿Se siente la mochila de la responsabilidad por llevar el reinado?
—Este año es diferente al año pasado. Sentí la mochila de representar a mi comparsa el año pasado. Después de ganar es diferente, porque no solo llevás tu bandera sino que llevás la bandera de las demás comparsas. Cuesta un poco pero me acostumbré, no solo nombrar a mi comparsa, sino a Emperatriz, Bella Samba e Imperio. Este año salí más relajada y desfilar en la manga como la reina del carnaval es algo increíble.
—No obstante, ¿vas a continuar ligada al carnaval?
—Por supuesto, tengo varias aspiraciones en el carnaval, pero en los próximos años.
—Se lo vive de una manera especial porque todo el año se trabaja.
—Si el clima nos acompaña terminamos el 2 de marzo y al día siguiente a que se abran los sobres –para conocer a la nueva campeona– ya seguimos trabajando para el carnaval 2020. Se trabaja todo el año porque todos queremos llevarnos el campeonato.
—¿Cómo es un día de Agustina previo a salir a la manga?
—Te levantás ese sábado con una adrenalina, de que ya querés que llegue la noche. Cuando empieza la primer comparsa, y ni te digo que si pasamos últimas, la hora no pasa más. Nos cambiamos, nos maquillamos. A mí me toca vivirlo con mi familia y mis amigas, así que somos un grupo grande.
—Y no se deja ningún detalle librado al azar.
—Para nada. Tiene que estar bien puesto el traje, los precintos, el brillo, las cremas, el maquillaje, las pestañas, las uñas. Es todo como un ritual antes de salir a la manga.
—Y ahora te consulto, ¿cómo vivís el año sin el carnaval?
—Se vive todo el año esperando la primera noche del carnaval. Y este año será raro porque ya no seré la reina. El año pasado trabajamos un montón, todas las semanas teníamos una promoción o me llamaban para hacerme una nota o invitarme para alguna fiesta nacional.
—¿A qué te dedicás Agustina?
—Soy estudiante de Ciencias Políticas y trabajo algunos fines de semana en una tienda de una chica que también sale en el carnaval.
—Y el acompañamiento familiar debe ser un pilar
—Mi familia siempre atrás, mi mamá siempre acompañándome, este año está trabajando de jurado. Mi hermanito va como acompañante mío, mi papá sale empujando el carro y mi otro hermano lo ve desde la tribuna. Los cinco vivimos muy de adentro al carnaval.
—¿Con cuántos integrantes cuenta una comparsa aproximadamente?
—Mi comparsa tiene 383 integrantes y está Emperatriz, que es la más concurrida, que cuenta con alrededor de 480 personas. También hay que mencionar a costureros, carroceros. Además está la hinchada que participa desde afuera, se estima en 200 o 300 personas por cada hinchada. Por ejemplo, en nuestra comparsa Ráfaga tenemos en (el barrio) La Bianca nuestro taller. Ahí se les muestra a los integrantes el diseño de cada año, se las guía a las chicas en lo que tendrán que hacer. Nosotros nos hacemos nuestro traje, pero hay comparsas que tienen talleres propios y se les entrega cada traje.
—¿Te ves en algún momento afuera del carnaval o ya es parte de vos misma?
—No me veo fuera del carnaval. No me imagino no saliendo en el carnaval. Uno nunca sabe, pero está muy en mí salir en el carnaval. Seguiré defendiendo al carnaval para que crezca y no dejar de invitar a todos para que vengan al Carnaval de Concordia, porque es el más pasional del país.
—Y por último, ¿cómo posicionarías al Carnaval de Concordia de acá a algunos años?
—Dentro de tres o cuatro años vamos a hacer un ruido mayor a nivel nacional. Ya lo venimos haciendo, se viene trabajando para eso. En unos pocos años vamos a llegar muy lejos.