La investigación por el ataque sexual sufrido por una joven de Paraná el 18 de enero, avanza en el análisis de mucha información obtenida, con las esperanzas de poder encontrar al autor. Todavía quedan algunos cabos sueltos, pero creen que con el tiempo se podrá esclarecer el episodio, sobre todo con la recuperación de la víctima, quien aún está muy conmocionada por el hecho, bajo tratamiento psicológico.
Una testigo aportó datos del posible abusador que manejaba un Fiat Duna
Declaró que sufrió acoso de un hombre que iba en un auto como el del abusador de una chica en Paraná
14 de febrero 2017 · 07:10hs
Un dato importante fue aportado por una testigo que se acercó a la Fiscalía a contar que unos meses atrás sufrió acoso callejero por parte de un sujeto que iba en un auto similar al descripto por la chica: un Fiat Duna blanco. La información se sumó al caudal de evidencias, con las que los investigadores están tratando de armar un perfil de sospechoso que permita dar con el abusador.
El hecho causó estupor en la ciudad, cuando se supo que una joven de 21 años había sido hallada en calle Victoria al 500, en estado de shock. En horas de la noche de aquel miércoles, un vecino la auxilió. Llegó la Policía y luego la víctima fue trasladada a Tribunales para corroborar sus datos personales. Se aplicó el protocolo de actuación y fue contenida por un psicólogo. Luego, en compañía de sus padres, fue trasladada al hospital San Martín.
Unos días después, la chica volvió a entrevistarse con la fiscal Fernanda Ruffati. Por el trauma sufrido en el hecho hay muchos datos importantes que no recuerda. La joven está bajo el tratamiento y la contención de una psicóloga de Tribunales, por lo cual esperan que con el tiempo pueda ir recordando algo más del episodio. Por ejemplo, si bien sabe que estaba en una parada de colectivo esperando el colectivo de la Línea 8, aún no recuerda con precisión el lugar.
El mismo día del ataque, una joven leyó en internet que la Policía buscaba un auto Duna blanco. Se comunicó con UNO para contar el hecho sufrido unos meses antes, cuyos detalles se omiten para resguardarla, y así se pudo poner en contacto con la Fiscalía, para luego presentarse a brindar su testimonio para colaborar con la investigación. Se había tratado de un acoso callejero prolongado, en la zona céntrica de Paraná. La joven recuerda las características del agresor y del vehículo. Por esto se realizó una galería fotográfica que resultó positiva.
Estos datos de suma importancia, se cotejarán con la información que en un futuro pueda aportar la víctima del abuso sexual, así como con las imágenes de las cámaras de vigilancia del 911 y de particulares de la zona de ambos hechos. Hay una gran cantidad de material fílmico que está siendo analizado por los investigadores, tanto de las grabaciones de las cámaras del 18 de enero como de la fecha indicada por el hecho del año pasado. Hasta ahora no ha surgido nada elocuente, aunque sí algunas imágenes que pueden conducir a alguna identificación.