Tengo una cosa que me da vuelta en la cabeza. Soy Serafín, y con mi familia vivíamos en un barrio muy peligroso de Paraná. Entonces mi papá, para protegernos, decidió vender la casa y con el dinero compró una casa en Colonia Avellaneda, en calle Urquiza, para volver a empezar. Yo estaba recontento porque todo el día jugaba con mis dos mejores amigas, y luego esperaba a mi padre cuando llegaba del trabajo para recibirlo con mucho besos por toda su cabeza.
Y varias veces me enojaba con mi mamá porque me tenía que bañar y yo le escapaba.
No se qué pasó ese domingo 3 de enero, me escapé por debajo del portón para querer jugar con los demás perros y vos, rottweiler de enfrente de casa, me agarraste al medio, me perforaste los pulmones y quebraste la cadera. Mi familia me llevó urgente a la veterinaria pero aguanté hasta lo que pude esa noche y con mis últimas fuerzas me despedí de mi familia humana...
La bronca que tengo es que jamás pidieron disculpa a mis dueños. Pero yo, desde el cielo animal te estaré vigilando para que no ataques a mis compañeras de juego.
Vos, rottweiler, tenés que estar con bozal y correa en la calle, aunque tu dueños dijeron que fue la primera vez que atacás a otro animal, mucho más pequeño, pero me quitaste la vida... puede haber otras víctimas.
Pero mi mayor tristeza es que mis pequeñas dos amigas no encuentran consuelo.Yo fui recogido la calle y me dieron todo su amor.
Me despido y espero que hagan cumplir las regulaciones sobre perros de gran porte.
SERAFÍN
Serafín envió una carta desde el cielo de los perros
Un lector de UNO envió este texto con la historia del perrito Serafín, que murió tras ser atacado por un rottweiler en Colonia Avellaneda. Una forma original de concientizar sobre el peligro de los perros de gran porte.
8 de enero 2016 · 20:00hs