El fiscal que investiga la causa del robo y venta de armas incautada en el depósito de Tribunales de Paraná, Ignacio Aramberry, afirmó que los imputados que formaban parte del poder judicial son "empleados infieles" y que no se trata de una cuestión estructural en la Justicia. Asimismo dijo que espera nuevos informes periciales que le permitirían profundizar la investigación o bien ya ir preparando la causa para la elevación a juicio, con las hasta ahora ocho personas imputadas.
Ignacio Aramberry: "Es un acto de corrupción, pero no es estructural"
El fiscal que investiga el robo y venta de armas ilegales en los Tribunales de Paraná se refirió por primera vez a la causa
22 de junio 2016 · 09:42hs
Por primera vez el fiscal Aramberry se refirió públicamente a la causa que durante un tiempo estuvo bajo reserva de actuaciones, debido a lo delicado del caso. En diálogo con el programa Primer Paso, en la 97.1 La Red Paraná, contó cómo comenzó todo: "Los últimos días de enero, a partir de una información que me llega, que podrían estar en el comercio armas que habían sido previamente secuestradas en causas judiciales. Pedí autorización al juez de Garantías para realizar unos allanamientos, se secuestraron celulares y la investigación continuó. A partir de ahí le encomiendo la profundización de la investigación a la División Robos y Hurtos quienes inician una pesquisa direccionada a descartar o acreditar la información".
La sospechas se ratificaron y "se obtuvieron los numeros telefónicos, pido al juez de Garantías Eduardo Ruhl autorización para realizar intervenciones telefónicas. Se comenzó con la primera línea donde surgían conversaciones relacionadas a la venta ilegal de armas de fuego. Reunimos la información que necesitábamos para llamar a estas personas a declaración de imputado, se realizaron varios procedimientos, se detuvo a varias personas, y después algunas, además de admitir el hecho, aportaron datos relevantes, por lo cual se produce la segunda parte de las medidas, donde se produce una detención. A partir de ahí es que empezamos constatar si realmente existían faltantes en el depósito, medida que sigue".
Acerca de los procedimientos realizados el sábado en los barrios Belgrano y Presidente Perón de Paraná, en la casa de un presunto intermediario en la empresa delictiva, Aramberry dijo: "Tengo la información que nos dio unos de los imputados cuando hizo su declaración, a su vez intercambio de llamadas telefónicas con la persona que fue allanada el fin de semana, y además este fin de semana se secuestraron celulares y computadoras, que tienen que ser analizados para confirmar que esta persona también recibía armas".
Teniendo en cuenta el fuerte cimbronazo que produjo esta causa en el interior del Poder Judicial, el fiscal aclaró: "Tenemos que hablar de empleados infieles, no es una cuestión estructural, es un acto de corrupción pero no es una cuestión estructural, claramente, y yo en todo momento recibí el apoyo para esta investigación tanto desde la presidencia del Superior Tribunal de Justicia como por parte del Procurador (Jorge García) quien me dio absoluta libertad para investigar y llegar hasta las últimas consecuencias".
Por último, consultado sobre si la investigación está por concluir o si se podrían esperar nuevas imputaciones, Aramberry explicó: "Estoy esperando una pruebas que considero fundamentales que es el entrecruzamiento de llamados en las líneas telefónicas, lo cual me daría un panorama definitivo o con posibilidades de continuar con la investigación sobre otras personas, por eso no puedo pronunciarme si la causa va a ser elevada a juicio inmediatamente".