El perfil de José Eduardo Lucero es muy similar al de la mayoría de las personas condenadas por transporte de drogas: joven, primaria incompleta, situación laboral precaria y a cargo de una familia. Carne de cañón para los narcotraficantes que buscan a quienes, por poco dinero, realicen la tarea más riesgosa: llevar la droga de un punto del país a otro, por lo general desde el proveedor al distribuidor o vendedor. El joven de 25 años cayó hace un año en el puesto caminero de Paso Cerrito, en Federación, con casi 10 kilos de marihuana. Ahora prefirió evitar el juicio y acordó una condena de cuatro años y dos meses de prisión.
Admitió llevar droga por encargo, pero no delató a quien lo envió
El joven uruguayense José Lucero acordó cumplir cuatro años y dos meses de prisión. Llevaba la marihuana oculta en grasa de auto
25 de marzo 2017 · 09:56hs
El procedimiento policial se realizó el 18 de marzo de 2016 a la 1.30 en el kilómetro 341 de la ruta nacional 14. Los uniformados de Seguridad Vial revisaron el colectivo de la empresa Expreso Singer proveniente de la ciudad de Apósteles, provincia de Misiones y que tenía destino final Concepción del Uruguay. El perro antinarcótico Sasha marcó la presencia de droga en una caja de cartón marrón claro, que tenía adosado el ticket de equipaje Nº 454010. Los policías hicieron descender a los pasajeros para que reconocieran sus equipajes y detectaron que uno de ellos tenía en su pasaje abrochado el duplicado del ticket de la caja sospechosa.
Cuando la abrieron encontraron 11 paquetes con marihuana de diferentes tamaños, envueltos con nailon transparente y grasa de auto. La pericia determinó la cantidad de la sustancia equivalía a 30.154 dosis.
Otras pruebas que complicaban a Lucero eran los mensajes de texto que tenía en su celular donde se destacaban contactos, llamadas y mensajes entrantes y salientes elocuentes a la tarea que debía cumplir. A su vez, se contaba con la declaración del chofer del colectivo, a quien el muchacho le confesó que la caja era suya.
En el juicio abreviado, Lucero, quien fue asistido por el defensor oficial Mario Franchi, acordó con el fiscal general subrogante Leandro Ardoy, que se le aplicaran las penas de cuatro años y dos meses de prisión y multa de 2.000 pesos. En una audiencia ante el Tribunal Oral Federal de Paraná, presidido por Lilia Carnero, reconoció su responsabilidad en el hecho delictivo.
En el fallo condenatorio, la jueza remarcó que el transporte de la marihuana "fue el programa que ejecutó Lucero, interviniendo como agente del empresario que le encargó la faena ilícita, según lo hizo saber en la audiencia, a quién no quiso delatar", y destacó que el joven "se mostró arrepentido y deseoso de salir a trabajar para mantener a su familia".
"En este contexto -reflexionó la magistrada-, donde reina la pobreza, es innegable que los verdaderos empresarios de la droga, evitando con su cuerpo correr riesgos, se han valido del imputado para llevar a cabo esta empresa ilícita. De todos modos, él aceptó la encomienda, sabiendo de qué se trataba". Y también fue un atenuante que el joven "insistió en el sufrimiento que le causa la desprotección de su familia".
Ampliaron indagatorias
El jueves se ampliaron las indagatorias en el Juzgado Federal de Paraná, en la causa que investiga la banda narco presuntamente lideradas por Hugo Ceola y Cachete Viggiano, que cayó tras el secuestro de un camión con 252 kilos de marihuana en Feliciano.
Según supo UNO, el trámite judicial consistió en una modificación del hecho respecto a la cantidad de dinero secuestrado en los procedimientos, que ascendió a unos 300.000 pesos.