El reconocido periodista uruguayo Víctor Hugo Morales presentará esta tarde su último libro en Rosario. El teatro El Círculo es el lugar elegido para que el experimentado relator brinde exponga sobre “El rebenque del diablo. Cablevisión y yo”, su última publicación, que cuenta la historia de una guerra de más de 25 años contra el poder mediático.
Víctor Hugo aseguró que Clarín lo único que busca es "dañarlo y perseguirlo"
Al referirse al libro, en diálogo con el programa "El primero de la mañana", que se emite por La Ocho, Morales contó que el mismo cuenta "la historia del partido entre Boca y Real Madrid, que se jugó en Japón el 28 de noviembre de 2000 en el marco de la final de la Copa Intercontinental. Ese partido era de Cablevisión y había una gran protesta generalizada porque eran los tiempos que la gente debía pagar para ver los partidos de fútbol. Yo en ese tiempo estaba haciendo una campaña muy fuerte que felizmente terminó en lo que llamamos fútbol para todos".
"En ese mes de junio del año 2000 me había presentado en el senado de la Nación con una larga perorata ante los senadores pugnando contra lo que yo llamaba ya entonces la mafia mediática que tenía el poder sobre el fútbol y que en aquel caso se estaba robando las Eliminatorias del año 2000 con una maniobra que era una vergüenza. Y cuando llega el partido de Boca con Real Madrid el programa en el que yo trabajaba en la televisión publica resolvió, seguramente porque yo participaba, poner una pantalla detrás de mi donde se podía ver el partido. La escenografía del programa eran varios televisores en donde se podía ver el partido con distintos canales de distintas partes del mundo. El espectador podía ver algunos tramos del partido. Como consecuencia de esto, hubo un juicio en el que fui exculpado en primera instancia. Yo asumía mis riesgos en una pelea en la que yo era como un ratón contra un dinosaurio por el inmenso poder del grupo Clarín. Eso era lo que me correspondía. Pero yo no tenía la manera de levantar la palanca para que se cumpliera esa decisión", agregó.
Y continuó: "La cuestión es que en la primera instancia me absolvieron. Pero Clarín apeló. Lo que le importaba era dañarme. Hostigarme y perseguirme. De esa apelación surgió una Cámara integrada por tres jueces que son de la parte vergonzosa de la justicia que fallaron contra mi persona, y esto fue a parar a la Corte Suprema de la Nación. A Ricardo Lorenzetti, el hombre más proclive para hacer lo que Clarín le diga. Y él determinó que yo le pague a Clarín. Los imputados eran ATC, el productor y yo. Pero el que tengo que pagar todo soy yo todo. No la tercera parte. Y si puedo que le cobre a las otras partes. Esa es la historia del libro. Con alguna de la viñetas que ocurrieron esos días. Como un motín en una cárcel de Córdoba, porque querían ver el partido y no le instalaban el cable".
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