Luego de una semana de declaraciones que acorralaron al piloto Ignacio Laporta en el juicio por la tragedia vial que se cobró la vida de la joven de 19 años Sofía Pacco Villalba, ayer el imputado declaró para mejorar su situación ante el juez que deberá condenarlo. Además de las cuestiones referidas a la conducción que ocasionaron el siniestro, el imputado buscó humanizarse respecto de su actitud luego del choque: dijo que se sintió shockeado, que no sabía qué hacer, pidió perdón y se quebró cuando afirmó que llevará de por vida el recuerdo de haber causado la muerte de Sofía.
Laporta se sentó frente al juez Miguel Álngel Giorgio y respondió preguntas solo de su abogado defensor, Marcos Rodríguez Allende. Recordó que esa noche conducía luego de haber consumido alcohol y drogas. Dijo que iba por calle Mitre y una moto que circulaba en el mismo sentido, a la altura del hotel Howard Johnson, le hizo perder el control total del auto, clavó los frenos y se deslizó unos 70 metros, derrapó en la curva hasta impactar contra la pared de una casa en la esquina de Santiago del Estero.
Sobre la velocidad planteada por los especialistas de Accidentología Vial de la Policía, cuyas pericias arrojaron que iba a no menos de 163 kilómetros por hora, Laporta sacó su chapa de piloto: “Lo único que voy a decir con respecto a la velocidad es que jamás pudo haber sido esa la que llevaba, jamás. Sé que en su momento no se hizo otra pericia, pero yo corro en auto desde los 6 años, si bien en ese momento no estaba en un estado de lucidez, esa velocidad jamás pudo haber sido porque el auto hubiera tumbado en la curva, ni siquiera hubiese pegado en el cordón”.
El joven de 29 años admitió que “estaba muy borracho y drogado” y que luego de que se bajó del auto tras el impacto “no sabía qué hacer”. Algunos refirieron que Laporta se había ido del lugar y luego regresó porque estaba preocupado para sacar algo del auto. Sobre esto aclaró: “Cuando yo me voy del lugar los chicos accidentados ya no estaban, yo me fui cuando no había más nadie, quedaba solamente personal policial. A un amigo que me conocía de las carreras, no recuerdo su nombre, le pedí que me llevara a mi casa para buscar ayuda porque no sabía cómo actuar, no sabía qué hacer en esa situación. Cuando volví, yo no fui al auto a buscar el teléfono celular, sino a buscar las llaves de mi casa. Jamás me habría importado más mi teléfono que la vida de las personas”. Incluso, contó: “A un oficial le dije que quería ir al hospital y me dijo que ni se me ocurra porque ahí me iban a linchar”.
Cuando quedó detenido (al otro día del hecho) Laporta recordó “En Alcaidía me vio un médico, me dieron medicación, estaba muy arrepentido, muy mal, llorando, y como no podía concentrarme en nada me tuvieron que medicar para tratar de bajarme un poco, porque no podía creer lo que había pasado”.
Luego Laporta reflexionó acerca de lo que sucedió: “Yo toqué fondo. Ese día para mí fue tocar fondo, la vida me venía dando advertencias, pero esto fue tocar fondo, muy duro, y me di cuenta de que el camino que llevaba no era el correcto, entonces ahí es cuando decido empezar un tratamiento para alejarme de todo, del alcohol, las drogas, todo eso que me había llevado a arruinar la vida de estas personas”.
Y por último le dijo al juez con la voz quebrada: “Desde el día del accidente, todas las noches pienso en Sofía, en la familia y en lo mal que le hice. Eso es algo que lo llevo toda la vida y nunca nadie me lo va a sacar. Nada más”.
Las palabras de Laporta fueron escuchadas con atención por los familiares de la víctima fatal, Sofía Pacco Villalba, quienes se mostraron indignados: “Jamás se acercó a pedir disculpas ni a darnos el pésame. Hay una nena que se quedó sin su mamá. Todavía estoy temblando por escuchar tanta cantidad de barbaridades. Hay más de 30 personas que dijeron lo contrario. Dijo que ayudó a las personas y estuvo hasta último momento e iba a menor velocidad. Es mentira, es todo ficticio. Pasaron muchos meses desde que falleció mi hija y él no apareció”, dijo Andrea Pacco, mamá de Sofía.
También habló Andrés, papá de la joven fallecida acerca del arrepentimiento que dijo tener el acusado: “Perdón le va a tener que pedir a Dios porque ya tuvo mucho tiempo para hablar con nosotros y no vino nunca”.El lunes serán los alegatos de las partes: la Fiscalía pedirá una pena de prisión efectiva por homicidio culposo, y los querellantes que representan a las diferentes víctimas reclamarán distintas condenas: desde sanciones mayores a los ocho años de cárcel por homicidio simple con dolo eventual, hasta una pena condicional, al igual que la defensa.
“Es una cuestión del ámbito"
Además de la acusación por la tragedia vial, Ignacio Laporta afronta otras dos causas penales que se investigaron en la Unidad Fiscal de Violencia de Género, por la denuncia que había realizado un mes antes del accidente en el Parque Urquiza su actual pareja. Al respecto, el joven también declaró y se defendió: negó haber ingresado por la fuerza a la casa de sus suegros, desmintió haberlos amenazado en reclamo de dinero y refutó haber robado un teléfono celular.
Sobre esto, su defensor explicó: “Son hechos que se suscitaron en el ámbito de la faz privada y de una discusión familiar que dista absolutamente de lo que se hablaba en principio de violencia de género y delitos de privación de la libertad, violación de domicilio. Nada de esto existió, hasta los mismos testigos hablaron de que él no violó ningún domicilio, no forzó ninguna cerradura y que ingresó sin violencia, no hubo amenazas ni hubo hurto. Más allá de la defensa que hizo Laporta, los testigos de cargo de la Fiscalía se cayeron a pedazos. Es una cuestión absolutamente del ámbito privado y si bien hubo una discusión de un tono fuerte, alto, no es un delito tipificado en el Código Penal”.
Laporta se mostró conmovido por la tragedia y generó polémica
El acusado por la muerte de una joven pidió perdón, lloró y dijo que con el accidente fatal tocó fondo. El lunes pedirán que vaya preso
21 de mayo 2016 · 09:04hs