Mariano, un estudiante universitario, sacó un boleto hace un par de semanas desde General Ramírez hacia Paraná. El horario en que debía pasar el colectivo era a las 20.25. Como no llegaba, él y otros pasajeros preguntaron y la respuesta fue que la unidad se había roto de camino, y les dieron la opción de aguardar que llegara un refuerzo. "El refuerzo no llegó nunca y nos dijeron que la otra opción era esperar otro micro que pasaba cerca de la medianoche, que venía de Buenos Aires, y si quedaba lugar ahí podíamos viajar. Ya eran las 23, y cansado opté por devolver el pasaje y me fui a mi casa. Por suerte encontré una amiga que iba a Paraná en auto, así que me fui con ella. No sé qué habrá hecho la otra gente", contó a UNO.
Crecen las quejas por demoras de los colectivos interurbanos
Los desvíos por el cambio de sentido en las calles en Paraná y desperfectos mecánicos provocan retrasos y afectan a los usuarios
12 de abril 2017 · 07:10hs
A su vez, mencionó: "La chica que estaba al lado mío decía que todos los fines de semana pasa lo mismo. Y mi abuela hace meses llegó de Buenos Aires a las 2 en un colectivo que tenía que llegar a las 23.20, porque se rompió en Gualeguay y esto hizo que se atrase tanto tiempo".
Sobre la empresa, que sale de Paraná, pasa por el acceso a María Luisa, Crespo, General Ramírez, Aranguren, Hernández, Nogoyá, y en algunos casos llega también a Victoria, Concepción del Uruguay o Buenos Aires, las quejas se repiten: "Iba a Ramírez el viernes pasado y el colectivo que tenía que salir a las 16.30 se rompió. Salió el refuerzo y los que teníamos pasaje para ese horario tuvimos que esperar otro hasta las 17", relató una pasajera, ofuscada porque el regreso a Paraná fue más fastidioso todavía: compró un boleto para las 23.20 y el micro llegó a la 1. El chofer aludió que les costó salir de la Terminal de Retiro, en Buenos Aires, porque los viernes se congestiona. Cuando la mujer preguntó dónde quejarse por una tardanza que superó una hora y media, de mala gana el chofer le dijo que lo haga en la ventanilla de la empresa, sin ofrecerle el Libro de Quejas con que debe contar cada unidad.
Consultado sobre la situación, el subdirector de Transporte de la Provincia, Juan Carlos Mosqueda, señaló: "Hay un Libro de Quejas en cada Terminal y en cada coche también y tienen la obligación de entregárselo al pasajero que lo pida. Ahí pueden exponer la falencia y hacer la denuncia; el pasajero tiene que identificarse y nosotros lo citamos y atacamos el problema en forma inmediata en el lugar que sea de la provincia, para eso estamos".
En este marco, comentó: "Últimamente hemos tenido quejas por varias empresas debido a las demoras, no solamente por una en particular. Por lo general se fueron resolviendo los casos de manera simple, pero por ahí hay tardanzas que responden a una cuestión climática. Y en Paraná tenemos una problemática que no podemos resolver, que es el cambio de circulación de las arterias".
El funcionario señaló que a la Terminal de la capital provincial ingresan cientos de unidades por día, y afirmó: "Se ha complicado porque casi todos los que venían del sur entraban por avenida Ramírez y doblaban por Alsina los que iban a la plataforma nacional, porque les quedaba enfrente. Los que iban a la plataforma provincial daban la vuelta a la plaza Martín Fierro e ingresaban. Hoy en día, por ejemplo, los que vienen del sur y entraban por Ramírez, pasan por Deán Álvarez van por Soler, de ahí por Almirante Brown, vuelven a subir por Ramírez y tienen que dar vuelta toda la plaza. Un cálculo que tenemos es que son 25 minutos de demora y hemos tenido muchas quejas por esto".
Para poder resolver esta situación, señaló que hablaron con el secretario de Transporte de la Municipalidad. "Se comprometió a buscar una solución, pero hasta ahora no se ha hecho. Y nosotros estamos con este inconveniente, que no es una cuestión esporádica, sino que es un problema diario y permanente", aseguró.
Por otra parte, mencionó que algunas líneas están autorizadas a ingresar a la capital entrerriana por el Acceso Norte, debido a la congestión vehicular de avenida Almafuerte, y manifestó que los colectivos que sí salen por esta arteria sufren demoras considerables: "Con todo esto ha habido un pedido de ciudades vecinas por la demora que tienen los coches en salir de la ciudad. Por ahí algunos colectivos terminan tardando lo mismo para salir de la ciudad que lo que le lleva llegar a una localidad que está a 40 kilómetros", expresó Mosqueda.
Por último, comentó que la Terminal de Paraná tiene 22 plataformas y durante los fines de semana largos, cuando se colocan refuerzos, también se generan retrasos. Y al no haber lugar de espera para las unidades muchas veces los colectivos quedan obstruyendo el tránsito en avenida Ramírez. "Eso obviamente ocasiona demoras al pasajero, que no son deseadas. Para largar todos los coches a la vez tendríamos que tener terminales más grandes y dinámicas", concluyó.
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"Deben hacer la revisión técnica cada seis meses"
En referencia a las averías mecánicas que en ocasiones retrasan la llegada a horario de los colectivos a los destinos por los que deben recoger pasajeros, Juan Carlos Mosqueda señaló a UNO: "Desde la Dirección de Transporte le exigimos a las empresas la revisión técnica, que se las da la Nación. Eso los habilita por seis meses a transitar y nosotros controlamos desde la normativa y la ley que nos corresponde. Si no ocurriera eso tampoco habría subsidios, porque los datos van a la Secretaría de Transporte de la Nación".
"Eso no quiere decir que antes de los seis meses se pueda deteriorar la unidad por algunas cuestiones que escapan a la revisación, aunque es todo tan moderno que por lo general no hay nada que se pase por alto. Puede ocurrir sí algún problema en las rutas por alguna situación, pero los ingenieros tienen calculado el margen de desgaste que pueden tener entre los seis meses", opinó.
Por otra parte, al margen de las inspecciones que habitualmente hace la Dirección, recordó que los usuarios deben hacer una denuncia concreta para que puedan interceder frente a una línea en particular, y explicó: "Son 100.000 kilómetros diarios en la provincia los que debemos controlar, que equivalen a cuatro vueltas completas a la provincia. Entre Ríos tiene 16.000 kilómetros de rutas, donde solamente hay 8.000 pavimentadas, pero no queda pueblo sin conectar y no es sencilla nuestra tarea. Por eso apelamos a que los coches que transiten tengan la documentación correspondiente, para evitarnos problemas y evitárselo al pasajero, que es nuestra responsabilidad".