Dueña de una belleza única, la paranaense Viviana Greco se destacó, fundamentalmente, en el mundo de la moda desde muy joven. En Argentina fue protagonista de campañas publicitarias siendo la imagen de Perlea, por muchos años, Ricky Sarkany y Ponds (las cremas).
Con belleza y talento recorrió el mundo
Viviana Greco nació en Paraná, vivió en barrio Aatra y hoy triunfa en el viejo continente.
12 de noviembre 2016 · 08:30hs
Después y a medida que fue creciendo y generando inquietudes lógicas para la edad y su profesión, su interés fue avanzando hacia otros ambientes y fue así que realizó varios trabajos en otros ámbitos, algunos ligados al modelaje y otros no. Por ejemplo trabajó en televisión en programas de fútbol en Italia como Quelli Che Il Calcio y La Fomenta Sportiva.
Además estudió Crítica Cinematográfica, hizo un programa de cine y uno de sus grandes sueños es hacer otros programas de cine y de viajes. Hizo películas como Viento de Primavera y El Reclamo.
Habla italiano, inglés, francés y está estudiando el portugués para algún día hacer una temporada en Brasil o Portugal. Le dicen La Vivi, en el círculo más intimo, vivió en barrio Aatra, entre otros lugares de la capital entrerriana, tiene 42 años, actualmente reside en Madrid, no para y siempre buscar nuevos horizontes. Ama Paraná, la extraña, pero no sabe si volvería. Esta morocha infartante repasó su carrera y su vida junto a UNO.
— ¿Dónde naciste?
— Nací en Paraná.
— ¿Cómo fue tu infancia y adolescencia?
—Mi infancia fue muy tranquila. Jugaba como todas las niñas. Me gustaba leer cuentos, escuchar música y algún que otro programa en la tele. En la adolescencia salía un poco más con amigas, mirábamos películas todos los sábados en casa de alguna amiga, siempre me encanto el cine.
—¿A qué edad te fuiste y cuál fue el primer país?
— Empecé viajando por algunos países limítrofes como Uruguay y Brasil y mi primer viaje largo fue a La Habana, Cuba, y después al DF México. Fueron viajes de una semana. A los 18 años me mudé definitivamente a París. Fue el primer país europeo donde viví. Todo un sueño para mí porque anhelaba vivir en esa ciudad que conocía a través de los libros. Fue un cambio muy grande, lo viví siempre con mucha naturalidad pero también responsabilidad pues tenía que trabajar y viajar mucho.
—¿Cuándo arrancaste a trabajar como modelo?
—En la Agencia Elite que era muy exigente con las chicas. Creo que hacían bien, ya que fomentaban la disciplina y la cultura del trabajo, algo fundamental para el éxito.
— ¿Qué fue lo mejor que te pasó en la profesión?
—Lo mejor que me pasó fue poder viajar. De chica miraba el mapa mundi y soñaba con viajar. Fue un sueño cumplido que todo los días le agradezco a Dios. Eso me permitió crecer, aprender de diferentes culturas, aprender historia, geografía, arte. Viajar es un libro abierto que tienes que estudiar y más si tienes la curiosidad.
—¿Y lo peor?
—Lo peor es la soledad, a veces de los viajes por mi trabajo. Estar sola en los hoteles, llegar tarde a una ciudad porque se retrasa el avión, tener que esperar horas y horas en un aeropuerto.
—¿Seguís trabajando?
—Sigo trabajando más en televisión que es un ambiente que está relacionado. Me gusta mucho el tema periodístico de entrevistas y también escribo sobre mis viajes.
— ¿Formaste una familia?
—Con el tema de viajar postergué lo de la familia. Si tiene que llegar, llegará.
—¿Dónde vivís en la actualidad?
—En la actualidad estoy más en España, Madrid y de allí viajó, aunque también estoy más tiempo en Argentina siguiendo el trabajo de las colectividades y asociaciones italianas que realizan en Argentina, todo como corresponsal de la TV Italiana.
—¿Qué cosas se extrañan de Paraná?
—De Paraná extraño mi familia y amigos, la calma, la siesta, los asados de mi papá los domingos y los mates en familia.
—¿Cómo la ves a Paraná cuando venís?
—Paraná no cambió mucho. Creció, eso sí. Sé que hay varios proyectos de otro shopping y un cine con multisalas. Eso me gustaría. Hoy en día el mundo globalizado hace que todo llegue a todos lados inmediatamente con respecto a eso esta generación de adolescentes tienen ventajas con respecto a hace 20 años. Internet cambió la manera de comunicarse y la velocidad de la información así que viviendo en Paraná tienes acceso a la misma información que si vives en grandes centros urbanos como New York , París o Tokio .
— ¿Te informás estando en Europa respecto de las cosas que pasan en Paraná o en el país?
—Sí, siempre estoy informada sobre lo que pasa en Argentina y en Entre Ríos. Como decía hoy es más fácil. Me acuerdo hace 20 años estuve en Tokio tres meses, tenía la televisión solo canales japoneses así que compraba, semanalmente, el diario El País o El Corriere para informarme. Hoy es todo más fácil. Lo mismo hablar con mi familia y amigos. Con WhatsApp y Skype podés estar comunicada como si estuvieras en la misma ciudad.
—¿Si pudieras elegir elegirías el mismo camino, irte de Paraná?
—Creo que vivir en Paraná no es un inconveniente en muchas profesiones. En mi profesión es mejor estar en las grandes ciudades, pero hay gente que viaja. También hoy las redes sociales son muy importantes para difundir trabajos de prensa local. Antes era solo limitado a la ciudad y hoy estás en un canal regional, pero que se ve a través de una plataforma en internet en todo el mundo, inclusive si eres escritor, pintor o otro artista. Una ciudad más tranquila puede ser fuente de inspiración. Las ciudades grandes distraen.
—¿Qué diferencias existen entre vivir Paraná y hacerlo en Europa?
—Vivo en Europa hace más de 20 años así que vi varios cambios. Uno de los problemas de este continente es la inmigración y cómo resolver y alojar a tanta gente que escapa de la guerra. Otro es el terrorismo que afecta a países como Francia y Alemania. Si volviera a elegir irme de Paraná, me iría, nunca lo vi como el dejar Paraná sino ir a conocer el mundo y a enriquecerme. Pensé siempre en lo que ganaba y en mi crecimiento.
—¿Cómo fue tu adaptación al mundo europeo?
— Nunca tuve problema de adaptación. En Italia me siento como en mi casa, soy italiana y me adapté a sus costumbres, muy parecidas a las nuestras. De hecho la cultura que Argentina heredó de Italia. En algunos países es más fácil vivir. Lo que contaba de Japón fue más difícil pues es otra cultura, siempre tienes que respetarla, es como ir de invitado a casa de alguien. El respeto es primordial en la convivencia de cualquier cultura.
— ¿Cuándo vas a volver a Paraná definitivamente?
—No sé si volveré a Paraná definitivamente, no me lo planteo. De momento estaré más tiempo en Argentina.
— ¿Sueños?
—Un sueño es que Argentina mejore y que logre ser un país más seguro y con más oportunidades. Yo decidí irme a vivir al exterior porque me ofrecieron un contrato, pero además porque quería viajar y crecer como profesional. Hay gente con mucho talento que no es valorizada, médicos, científicos, ingenieros, gente que se va porque no tiene posibilidades de desarrollo en el país. Tutelar todo eso.