La primera edición de la Copa Ciudad de Paraná de fútbol se metió en la gente. A punto de terminar el certamen hay que resaltar que lo más positivo fue el acompañamiento del público ante cada partido que se disputó, ya sea en la cancha de San Benito o Don Bosco. Los organizadores del campeonato, que cuentan con el respaldo de la Vicegobernación de Entre Ríos, estuvieron acertados en fijar el valor de la entrada en 20 pesos, un monto muy inferior al que se cobra para ver los partidos de la Liga Paranaense de Fútbol, que este año rondará los 60 pesos.
Una Copa que tiene el respaldo del público
29 de marzo 2017 · 08:41hs
Si bien el certamen se ha desarrollado con gran éxito, el arranque no fue el mejor. El abrupto final del cotejo entre Instituto y Ministerio cuando apenas había comenzado el juego hacía presagiar lo peor. Sin embargo, la eliminación automática de ambos del campeonato fue un buen mensaje para el resto de los competidores.
La organización tomó medidas y las mismas fueron acertadas para poder llevar a una competencia sana. Se puede decir que la familia volvió a las canchas y también que se puede disfrutar de un espectáculos sin violencia, todos juntos y sin importar los colores.
Es un trabajo en conjunto, de la organización con cada club participante, ya que muchas veces los hechos de violencia se provocan desde adentro del campo de juego hacia afuera. Como pasó en la primera jornada, cuando un jugador de Instituto y Ministerio se fueron a las manos, pero en el sector donde se encontraban los espectadores no ocurrió nada. Es cuestión de soñar con la vuelta de la familia a la competencia de la LPF y que desde el ente regulador tomen como ejemplo las medidas que se implementaron durante el desarrollo de la copa.
La Copa Ciudad de Paraná es un torneo pensado para los clubes y así lo tomaron, se entregaron pelotas por su participación y cada institución fue trabajando con sus jugadores para dejar una buena imagen en cada partido. Es momento de aceptar los errores y empezar a trabajar sobre las nuevas ideas, con gente que quiere sumar y no restar.