En el mediodía de este martes los guardavidas armaron un puesto de vigilancia porque la situación trascendió en los medios de comunicación.
En el Thompson el ingreso al río está prohibido pero la gente se baña igual
Este martes al mediodía los guardavidas colocaron un puesto para advertir a los bañistas que eviten tirarse al agua del río Paraná. En el piletón no había nadie.
17 de enero 2017 · 13:58hs
Bañarse en la playa del complejo Thompson de Paraná está prohibido, porque el agua está contaminada, pero la gente lo sigue haciendo igual sin importar las consecuencias que puede tener en la salud.
El guardavidas encargado del complejo, Julián Lemos, consultado por UNO explicó que, más allá de que estén los carteles que indican la prohibición, la gente se mete igual, sobre todo en los días de mucho calor.
Al mediodía niños y grandes nadaban en el agua contaminada.
Lo llamativo es que, metros antes del agua, hay montículos de basura que fueron recolectando los empleados municipales después de las tormentas que pasaron por la capital provincial. Por momentos, el olor nauseabundo es penetrante y llega desde diferentes sectores de la playa.
El arroyo Las Viejas, que desemboca en el río Paraná, produce nauseas. La basura amontonada en la costa también emana olores difíciles de soportar teniendo en cuenta el contexto.
A todo esto, los dos paradores privados están "desconectados" de la playa, no generan servicios y tampoco tienen música. Cualquier parador, de cualquier parte del mundo, se caracteriza por los sonidos playeros que buscan clientes. Bueno, acá, no.
El único servicio son algunas duchas que comenzaron a funcionar esta semana.
La pileta
La opción en el Thompson es un piletón enorme que se alimenta con dos caños de agua de pozo que se abrió hace más de 10 años en el complejo.
El empleado municipal, Julián Lemos, confirmó que además funcionan dos caños extractores que mantienen el agua "en movimiento".
El problema está en que los usuarios tiran cigarrillos, pañales y hasta botellas de vidrio dentro del piletón.
La solución
El 29 de julio de 2012 el entonces secretario de Planeamiento, Infraestructura y Servicios, Guillermo Federik, anunció que la Municipalidad de Paraná iba a invertir 2 millones de pesos para dar continuidad al desvío parcial del arroyo Las Viejas en el balneario Thompson.
Las ofertas se iban a conocer el 16 de agosto en el despacho de la jefa de gobierno, Blanca Osuna.
"Los trabajos comprenderán la derivación del caño del desvío parcial del arroyo Las Viejas río adentro de Puerto Sánchez y la adecuación de la cámara existente interior para captar los excedentes pluviales del sector confinado”, había explicado Federik en esa oportunidad.
La obra nunca se realizó y esta gestión, que encabeza Sergio Varisco, decidió prohibir el ingreso al agua y reponer el proyecto del piletón.