Pablo Felizia/ De la Redacción de UNO
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Cuando Martín Palermo erró los tres penales contra Colombia por la Copa América de 1999 ni se imaginaba que iba a ingresar en los Guinness. Diferente fue lo de Chilavert, que metió tres en un solo partido y fue el arquero con más goles en 90 minutos. Lo de Messi es otra cosa: batió casi todo y los dos últimos fueron en Liga de Campeones de la UEFA y en la Champions League. En Argentina, la mayoría de quienes alcanzaron el reconocimiento están relacionados con el deporte como Fangio o los torneos ganados de polo. Pero al cura Benito Vernaz de Don Bosco, se le ocurrió una idea; desde el sábado cocina la garrapiñada empaquetada más larga de la historia y será presentada el miércoles.
En uno de los salones de la escuela Don Bosco de Paraná, por Uruguay y a la vuelta de la parroquia, el sacerdote preparaba ayer kilos de maní cocinado con azúcar. Una empresa local le consiguió hacer una bolsa en tira de celofán de casi ocho centímetros de diámetro y quiere llegar a los 33 metros de largo, la edad de Cristo en la Tierra; ayer iban 16 y lo más difícil, contó a UNO, va a ser transportarlo hasta Ramírez sin que se rompa.
Hay un atleta que tienen 150 records batidos, pero ahora, los Guinness ya no aceptan más de dos por persona, tampoco proezas peligrosas ni deformidades físicas.
Benito Vernaz, desde el sábado, cuando empezó a cocinar garrapiñada ya no la puede probar, hasta cuando duerme siente el aroma a caramelo.
“En este caso no es batir un record porque no existe uno con garrapiñada. Con un metro ya nos alcanza, pero vamos a hacer 33”, destacó. Cuando era chico vio en una revista al hombre más alto del mundo de 2,72 metros y hace 12 años que quería hacer esto, desde que era párroco en Seguí. “No pude antes porque está todo escrito en inglés. Intenté con un alfajor y no pude. Después se me ocurrió intentar con la garrapiñada porque es algo que hacemos mucho en las parroquias. Garrapiñar quiere decir bañar y es algo nuestro”, señaló.
Para ayudar
El miércoles desde las 10 hasta las 17, van a presentar la garrapiñada más larga de la historia, frente al templo de Uruguay y Ramírez. Pero llevar adelante semejante proeza, guarda un objetivo mayor: los 33 kilogramos –lleva un kilo por metro aproximadamente– de maní azucarado, será donado al Hospital de Niños San Roque.
Además, ese mismo día en uno de los contenedores de basura que van a limpiar para la ocasión, instalarán un pañalómetro. “Es para que la gente lo llene con donaciones. La cooperadora del Hospital nos pide que sean los pañales más chicos que vienen, los prenatal, que son los que más se necesitan porque nacen 22 niños por día”, agregó Vernaz.
Una amiga del cura lo ayudó con la traducción del inglés al español de las bases y condiciones. Desde The Guinness World Records respondieron. Si bien aún no está autorizado y debe esperar, sí está inscripto, es decir que el miércoles habrá un registro fotográfico, una filmación y un escribano que certificarán la gigante garrapiñada empaquetada.
“Lo pueden aprobar o no, hasta quizás nos exijan hacerlo de nuevo. Bueno, no hay problema, lo haremos. En alguna época, si entrabas te daban un dinero en dólares, si lo ganamos también será donado al San Roque”, dijo.
En los Guinness se calcula que hay siete solicitudes como la de Vernaz por día, la del cura lleva la número 165.519. “Después de la Biblia, el libro de los Récords Guinness es el más vendido con 100 millones de ejemplares en 37 idiomas distintos. Guinness es la marca de una cerveza y su dueño empezó a competir con un amigo y a tomar nota de los resultados. Así empezaron”, contó.
La Municipalidad de Paraná les prestó para el miércoles un Bandera Argentina de 30 metros y esperan hasta la participación de la intendenta. “Es para representar al país porque los salesianos están en más de 2.000 casas y en 107 países. Que vean la bandera significa mucho”, comentó Vernaz que ayer, mientras cocinaba, estaba muy preocupado por el traslado de la producción a la vuelta de la esquina. La clave es que no se rompa, que no se parta y siga entero hasta extenderlo frente a la parroquia.
Por fuera del deporte, en Argentina hay records como del arroz con pollo gigante; uno que se adjudicó ser el coleccionista de autos en minuaturas con más cantidad de piezas; otro que realizó el viaje más largo del mundo en moto con 735.000 kilómetros recorridos; un grupo de empleados de una fábrica armó el mosaico con caramelos más grande jamás realizado; y quizás, a partir de la semana próxima, el cura Vernaz también se inscriba en esa gloria.
Una receta con características populares
El 16 de agosto de 2015 se cumplirán 200 años del nacimiento de San Juan Bosco, fundador de la Congregación Salesiana.
El cura de la parroquia, Benito Vernaz, contó que desde los inicios el movimiento siempre estuvo relacionado con los más pobres. “Él nació en Turín, en Italia y empezó a juntar a los chicos de la calle y a construir oratorios. El nombre de Salesianos, viene de San Francisco de Sales”, contó el sacerdote mientras cocinaba y explicaba la receta para una garrapiñada que, según confesó, se la enseñó una señora 30 años atrás. Desde entonces, la realiza y la enseña en cada lugar en la que estuvo.
Lo primero: se puede hacer en cualquier casa y no se debe dejar de revolver.
Las proporciones son: medio vaso de agua, medio de azúcar y tres cuartas partes de maní con pelecho, sin él no sirve porque se pierde color y el caramelo no se adhiere.
Todo eso se cocina y se revuelve hasta que el agua se evapora.
Luego –acá viene el primer secreto– debe sacarse del fuego y seguir con la cuchara hasta que se vuelva una pasta arenosa. Inmediatamente lograda, la sartén debe volver a las llamas moderadas con mucho cuidado de que el azúcar no se queme y dorar el maní con paciencia. Con este paso se logra el gusto y el color.
Cuando está terminado y aún caliente –y este es el segundo secreto– una recomendación es polvorear el resultado con coco rayado y al rato con un poco de cacao. Vernaz aseguró que ese último paso es un invento suyo y los resultados han sido siempre muy positivos.
Detalles de la noticia
*Martín Palermo entró en el Guinness con dos récords: cuando erró los tres penales contra Colombia en la Copa América de 1999 y por hacer el gol de cabeza desde 39 metros contra Vélez en 2009.
*José Luis Chilavert entró en los récords Guinness por ser el primer arquero en meter tres goles en un solo partido: se los hizo a Ferro, el 22 de noviembre de 1999. En 2011 le dieron el reconocimiento.
*Lionel Messi tiene varios records Guinness por cantidad de goles para el Barcelona. Pero entre los más destacados, es el único jugador en la historia en ganar cuatro Balones de Oro.
El cura Vernaz logrará un récord como Messi, Palermo y Chilavert
En solidaridad con el San Roque, el sacerdote de Don Bosco prepara el más largo paquete de garrapiñada para entrar en el Guinness
18 de junio 2015 · 07:56hs